ABR45. AMOR EN PÉRIGORD, de Aurora Royo Cañadas
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Entras en tu habitación. De repente, al lado de la cama, ahí mismo, una puerta que nunca habías visto. Curiosa, la abres para encontrarte con un frondoso jardín cubierto de flores. Sobre todas ellas destacan los narcisos que, coquetos, dejan que el sol bañe sus amarillos pétalos. Decides seguir el estrecho camino de piedra que te guía hacia el fondo del jardín, donde éste se convierte en un amplio espacio abierto tapizado de hierba y rodeado de árboles vestidos de primavera, animado por el rumor del pequeño riachuelo.
Al pie del imponente Château de la Commarque un suave relincho a tu espalda te anuncia la llegada del caballero de brillante armadura, a lomos del más blanco corcel que tu mente pudiese imaginar. Podría pasar por unicornio. Sin embargo, en lugar de cuerno, la testa presume de crines elegantemente trenzadas. El caballero detiene el caballo ante ti, levanta la visera de su yelmo y te sonríe con una intensidad que ilumina la mirada de sus dulces ojos verdes.
Cuando te tiende la mano para invitarte a subir al caballo, el brusco aterrizaje acaba con tu ensoñación. Lentamente y con desgana te desabrochas el cinturón de seguridad. Se acabaron las vacaciones.
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Hermosa historia, muy visual, con algunas imágenes potentes y un punto final «trágico». Benditas vacaciones… 😉
Fuerte abrazo, Aurora, y suerte con tu relato!
NACHO RUBIO
No nos engañes Aurora, que los caballos no llevan cinturón de seguridad. Mira bien, si tiene 4 patas o 4 ruedas.
Bonita historia, con puertas secretas, con jardines y caballeros. Me gusta la descripción de colores y luz. Bucólico y relajante. No dejes que se acaben esas vacaciones. huye al galope, bien agarrada, eso sí.
Suerte y abrazo.
Precioso relato, Aurora!
Descripciones muy logradas y evocadoras.
Buen giro final… aich.. qué lástima, verdad???
Espero que hayas disfrutado de las vacaciones… que te quiten lo bailaoooo!!!
Suerte y un abrazo
Marta
Hermoso texto onírico que nos lleva a la Dordoña y Aquitania, ese «mancha» francesa que, efectivamente, evoca el medievo. El giro final es simpático, todo un sueño, lástima. Suerte en la Tabla Redonda de fin de mes.
Bonita historia y me encantan las descripciones. Lástima sueño de primavera. Mucha suerte un saludo Elena
Muy original el cambio de tercio. Animo en la vida real. Un abrazo Gloria Arcos
Aurora, un cuento con tintes clásicos, incluso en el despertar final. Suerte y saludos.
Precioso!
Preciosa historia (me encantaría ser su protagonista) aunque todo sea un sueño; y precioso lugar para soñar, el Perigord, tierra de castillos y caballeros.
Saludos, Blanca
Tu si q sabes poner punto final a unas vacaciones… Me han gustado las descripciones. Casi puede una imaginarse caminando descalza entre la brisa, el rumor del aguas y el olor de las flores….
desearia haber soñado algo parecido en la media hora de sueño de mi tirtuosa vuelta de once horas en bus!!!!!
Tu si q sabes poner punto final a unas vacaciones… Me han gustado las descripciones. Casi puede una imaginarse caminando descalza entre la brisa, el rumor del aguas y el olor de las flores….
desearia haber soñado algo parecido en la media hora de sueño de mi tirtuosa vuelta de once horas en bus!!!!!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
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Pues a ti te cuesta poner el punto, Ene An, o es que tu pc se ha rebelado.
Saludos yla próxima en tren o bici o a pie 🙂
Cada vez que escribo desde el movil se empeña en repetir y repetir cada comentario. Intentaré borrarlos sino… ahí te queda por triplicado. Una pesadez por otro lado.
Lo del punto y final… si que lo llevo mal si; en general!
Aurora, vaya descripciones más buenas. El final es apoteótico nadie lo espera sorprende sobremanera al lector. Enhorabuena amiga muy buen relato, Sotirios.
Muchas gracias a todos. Un abrazo dominguero, ya que no vacacional.
Aurora ¿nunca escribes diarios de viajes? Te lo recomiendo. Empiezas así, como tú, todo detalles, felicidad y ensoñación y acabas poniendo mil lavadoras en casa. Divertido, muy divertido y ágil, como nos tienes acostumbrados. Un abrazo.
Un texto de estudiada dinámica. Una puesta en escena ágil y fluida que no decae, desde esa entrada valiente:» Entras en tu habitación…», pasando por ese intermedio que discreto nos invita a reflexionar(» podría ser un unicornio»), pícaramente apuntado, hasta ese final sorpresa que le proporciona al tema un tratamiento original. Me ha gustado.un abrazo!
Uno de esos relatos en los que te dejas mecer por la brisa, sientes la tibieza del sol y te imaginas la llegada del príncipe azul, y cuando más a gusto estás, hala, la zancadilla. Buena narración y mejor final.
Un abrazo.
Me has llevado a mi adolescencia y a mis sueños de caballeros.
Bien hecho!!!
Me gustó mucho tu relato Aurora. Tiene giros inesperados y final sorpresivo. Te deseo mucho éxito.
Oscar Quijada Reyes.
oscarjqr@gmail.com