JUN51. DESQUITE, de Virginia González Dorta
Lo lanzó con furia y en medio de la calle se deshizo en mil pedazos. Los trozos reflejaban la luz del mediodía, irisando las hojas de los plátanos. En cada uno de ellos, un pedazo de su vida. Pacientemente, esperó a que pasara el primer coche y el segundo y el tercero. Se despojó luego del albornoz y entró en la ducha. Cuando volvió a la ventana, los fragmentos eran tan diminutos como las pecas de su espalda.
Por fin podría empezar una nueva vida, el pasado ya no saldría cada mañana a reprocharle sus actos, escribiendo con letras de plata y cristal lo que no quería ver.
Aún tibia, la encontraron desangrada sobre el espejo quebrado del ascensor, con una esquirla de azogue en la yugular.
phoeticblog.blogspot.com
Terrible historia Virginia. A veces la realidad es tan terrible que preferimos acabar con ella. Un abrazo. Gloria Arcos
O que ella acabe con nosotros, pocas posibilidades más hay.
Otro abrazo para ti.
Un espejo asesino??? Terrible esto de la naturaleza muerta…
Hya furia y coraje en el micro..
Sañludos y enhorabuena
Cosa peores se han visto, sobre todo en la realidad. Abrazo también te va.
Es que no es tan fácil desprenderse del pasado. Yo diría que imposible.
Magnifico
Besos
Tan difícil que nos cambia la vida.
Trini, montón de gracias por acercarte, montón de besos también.
Cuando el espejo no miente siempre se registran los cambios y todas las muertes.
Besos!!!
El espejo.
Ese que nos devuelve tanto o más de lo que no deseamos.
Un abrazo, Aristos
Guau, amiga, que tragico te veo… Que tremenda…
Un abrazo asustado
Es el resultado de no querer admitirnos, Antiqua.
Otro abrazo para ti.
La vida es un ascensor, en los que hay momentos que subes y otros que bajas… ella estaba en el ático.
BUen relato.
🙂
No sabía de la capacidad de los objetos para inflingirnos daño.
Besos, Esi, mis gracis por venir.
Qué venganza…
Un abrazo, Virgi
Certera e inesperada.
Gracias, querida Marichuy.
Besos besos
la venganza se sirve en plato frío…
abrazos
Y si es inesperada, mejor.
Besos, Elisa.
Nunca te había leído, Virgi. Veo que he perdido mucho tiempo. Procuraré sanar el error. Un fuerte abrazo.
Un honor tu visita, Patricia.
Decirte gracias es poco, abrazarte fuerte no puedo como quisiera, quizá saliendo al balcón y mirando al horizonte, te lleguen un beso enorme.
La vida nos muestras sus esquinas más duras en el momento menos pensado.
Beso, Virgi, me gustó la precisión y el rápido final.
Y sin hacer tantos planes como nosotros.
Beso, María, 🙂 🙂 🙂
Qué buen micro, Virgi, sería un guión perfecto para un «corto».
«…los fragmentos eran tan diminutos como las pecas de su espalda», me parece una frase sublime.
bSöS.
Un corto muy efectivo sería, pura rotura y sangre.
Gracias, Sole, tantos besos como pecas.
Cuando nuestra conciencia no nos deja, lo peor que podemos hacer es mirarnos en un espejo, este nos dice siempre la verdad, nos guste o no. Muy bueno tu micro y deseo que tengas mucha suerte.
Besicos muchos.
Gracias, Nani, también las palabras de los otros nos devuelven luces y reflejos que nos hacen crecer.
Un abrazo grande.
Hola, Virgi.
Vaya con el espejo, qué malas pulgas tenía.
Felicidades.
Besos.
Fichada la tenía, sí, sí.
Y sabía qué debía hacer. Sin remisión.
Besos y gracias, Towanda
Un desquite después de otro.
Y un relato vertiginoso, con trazos de poesía.
Besos
Los espejos pueden ser muy líricos, aunque aquí prefirieron ser prácticos.
Mar, besos.
Crudo desenlace para una verdad no asumida.
Un abrazo
Gracias por venir, Myriam, un abrazo
Yo no veo venganza en el relato. Más bien, el hecho de que hay cosas para las que no basta hacerlas añicos, si no enfrentarla y asumirlas. Me ha gustado mucho este relato, con cierta moraleja.
Saludos Virginia
No siempre tenemos esa fuerza y luego, el futuro nos cobra la debilidad.
Besos, Begoña, besos
Siempre he creído que estamos hechos de cristales rotos… basta con que uno cobre vida y ahí…
Besos, creativa mujer.
Ahí, ahí nos daría la vida. Juntando todos esos trozos rotos, quiza veríamos la vida desde otro ángulo.
O ella nos vería a nosotros?…
Mil gracias, Eva, por venir.