125. LA DE LA ESQUINA (Sara Lew)
Soy la sombra de una niña perdida. Una mancha negra que se retuerce sobre sí misma intentando despegarse de las paredes, de los adoquines mugrientos o de las tapas de alcantarilla. El reflejo burdo de algo que ya no existe, porque aquella chiquilla que se soltó solo un momento de la mano de su madre desapareció hace más de veinte años. Yo soy lo que queda de ella. Soy su sombra, pero también su cuerpo, demasiado usado y transitado, no solo por sus raptores. De la niña, sin embargo, nunca encontraron los restos.
Breve pero intenso, Sara. Me parece una metáfora dura, pero muy bien hilada. Enhorabuena!!
Gracias, Alberto. Me he centrado en la sombra, y en qué diría si hablara. Y es lo que salió. Un texto duro, lo sé, que me llenó de tristeza cuando escribí el final.
Un saludo.