01. EL INTERÉS COMÚN (JAMS)
Conocí a Leo cerca de Rochefort, en un aparcamiento para autocaravanas. En cuanto bajamos de nuestra Caravelle, apareció con un par de cervezas de bienvenida. Nos mostró cada rincón del enorme camión de bomberos convertido en hogar, y disfrutamos una larga velada con ellos. Él hablaba por los dos. Nos dijo que era economista, belga -aunque el camión era alemán- y que prefería viajar así porque, como en la canción, lo hacía «a su manera».
Era divertido seguir sus discursos, repletos de sesudas sentencias, en perfecto español: «excava el pozo antes de que tengas sed», o «si comes pan es por interés del panadero».
Cuando pasaron a despedirse, estábamos discutiendo: Sonia había perdido sus Ray-Ban nuevas y yo no soportaba su indolencia. Ella creyó pertinente explicarles la tópica estupidez de que los catalanes nos preocupamos siempre por el dinero. Leo se rió y nos aleccionó con aquello de que «muchas veces vivimos en la probreza para evitar ser pobres».
Acabo de verlo en las noticias, formando parte de un equipo consultor del Banco Central Europeo de visita ofical por Madrid. Su aspecto impecable de traje me desorientó, pero le reconocí por el gesto alegre con el que lucía las Ray-Ban doradas de Sonia.
Un hombre peculiar que, desde luego, vive a su manera, con una aparente distorsión entre su vida privada, casi de estilo hippie, y su profesión de temido y respetado «hombre de negro» del BCE, lo cual no le impide, juguetón, apropiarse de unas gafas que no son suyas.
Frank te ha inspirado un texto original, Jams, a ver qué hace con nosotros.
Las apariencias engañan, podía haber dicho al despedirse este amante de lo ajeno y del refranero.
Me ha encantado.
Abrazos
Muy buen relato de una decepción. Yo también he conocido a algún Leo radical reconvertido en ejecutivo agresivo y te dejan un regusto amargo en la boca. En el fondo piensas «pobre tipo»
jajajajajjaj, solo le faltó saludar al estilo «esperame en el cielo». Joder, Juanan, con que peña te juntas en ATOcaravana!!
Beso.
Un «a su manera» digno de análisis. Muy buena apertura de convocatoria.
Abrazo, Juan.
Las apariencias engañan. Pero hay excepciones: este relato parecía bueno al principio y seguía siéndolo, o más, al final.
Sin duda, Leo es Leo a su manera. Curiosa historia sobre cuáles son los motores y las motivaciones de las personas, sobre las apariencias, lo que queremos ser y lo que nos dejan (¿o sobre la diferencia entre lo que somos y lo que aparentamos ser?).
Jams, buen comienzo con ese «a su manera». Me ha gustado mucho este texto que nos muestra muy bien la diferencia entre lo que las personas aparentan ser y lo que son en realidad; la vida a veces, te da sorpresas.
A la manera de ese y de muchos otros nos están dejando esquilmados a muchos. Si ya lo dice la sabiduría popular, se empieza como robaperas y acabas… Muy original y bien trabado. Juan.
Joder, Juan, que comienzas duro, con una propuesta ácida como las del propio Frank. También a mí se me ha quedado un regusto amargo, un pellizco en la boca del estómago que casi me anima a seguir precisamente la propuesta del relato ‘justiciero’ de Paloma, tan alejada de mis convicciones. Pero lo que me deja más preocupado es que no creo siquiera que haya habido evolución vital en ese personaje hecho «a su manera», sino una adaptación por su parte a las formas de cada época. Estomagantemente camaleónico.
Es lo que hay, quizá desde hace mucho más tiempo del que todos deseáramos. La crisis los ha puesto al descubierto, pero ¿desde cuándo estaban aquí, larvados entre nosotros? Ufff… Duro, ya lo he dicho, pero ahí está: como el propio Sinatra. Dosis de realidad.
Un saludo.
Juan, te ha quedado un relato muy bien escrito e inspirado. Descubres, de otra forma, algo enraizado en la sociedad. Saludos
Y ¿quién es él en realidad? ¿el viajero extravagante de caravana o el ejecutivo del BCE? ¿sabe él mismo la respuesta?
Algo sí es seguro que es: un mangui 😉
Buena historia.
Saludos!
Carme.
Dice un vecino mío,un hombre de edad, que nos tropezamos a menudo con santos señores que tienen blanca la cara y negras las intenciones. Está claro. Un beso.
A su manera vive el hombre, quizás seamos nosotros quienes nos equivocamos. Además ese par de anteojos tienen algo especial que no se consigue en una tienda.
En Argentina suele decirse: Lo que hay en Argentina es de los argentinos… (¡Qué falacia!)
Un abrazo amigo.
Es tiempo de magostos y castañas asadas por aquí. No vislumbro tal cosa por allá. Por cierto, np puedo dejar de decirte que se me van los ojos a la ‘probreza’ cada vez que paso por tu relato, que, a mi, me gusta, que lo sepas. Besos.
Desde luego, el hombre no ha mentido, le gusta hacer las cosas a su manera. Y a mí me ha gustado tu historia.
Un saludo
Una vida privada, pública, lo que eres, lo que aparentas ser. La percepción distorsionada por estereotipos. Muy buen micro, Jams, para mostrarnos el camino de esta difícil convocatoria. Abrazos.
Una espléndida apertura. Me gusta el toque ácido que destila y como dibujas al «personaje» del personaje. Esta consigna es muy abierta y seguro que da para mucho y bueno. Un abrazo 🙂
Mejor no lo podías haber descrito, Jams. Gracias. Así es. Así merito. Nos roban vilmente, al menor descuido. Con sus risas y sonrisas, con sus cervecita y la bisutería que adorna sus espacios, nos deslumbran para luego ¡zaz! dar el zarpazo. Y sí, luego los vemos en la Banca Mundial, trajeaditos y de guante blanco, luciendo el brillo de lo que nos quitaron… Excelente denuncia, Jams. Excelente. Gracias!
Pues creo que has acertado plenamente con mi intención completa. Gracias María.
Te ha salido un retrato muy actualizado del cinismo, Jams.
Bien contado.
Saludos cordiales
Estupendo relato. Nos acercas a un mundillo en el que no me gustaría estar, esa palabrería que te envuelve y te deslumbra para luego quitarte lo único que quizás tiene valor para ti. Esas gafas esconden más de lo que en apariencia son.
Fantástico Jams. Abrazos y besos.