SIN TÍTULO
Hielo, hielo, gritó Tomás al camarero que atendía al servicio de camarotes necesitamos mas hielo en el Camarote 115, sería usted capaz de proporcionarnos mas hielo, este whisky necesita hielo. El camarero consulto al maitre y este se encogió de hombros, estamos en medio del Atlántico de donde vamos a sacar hielo ahora. Hielo, hielo grito Ana a su hermana cuando vió el bulto que le estaba saliendo en la cabeza despues del golpe que se había dado contra la mesa cuando el barco dió aquel bandazo, necesitamos hielo para ese bulto. Hielo, hielo grito el marinero John cuando divisó el iceberg que tenían enfrente, lo que todo el mundo estaba pidiendo, aunque quizá era demasiado hielo.
Alguien dijo: «No desees algo, que te puede caer» o «¿No querías coles? pues el plato lleno».