ENCUENTRO 1 1 1 SEGUNDA RONDA
BEGOÑA HEREDIA /ALEJANDRO RODRÍGUEZ
Los participantes aquí señalados tendrán que publicar en el espacio reservado a los comentarios de esta entrada del blog, un relato INÉDITO de un máximo de 100 palabras antes de las 14 horas (hora local española) del JUEVES 28 DE ENERO y cuya única condición será que incluya estas tres palabras en cualquier tiempo, género o número:
HERMOSA / ECHAR / ARQUITECTO
Una vez publicado no habrá posibilidad de corregir ni reeditar.
Tras la publicación de los dos relatos publicaremos en cada entrada un formulario para la Votación Popular que permanecerá abierto hasta el viernes 29 DE ENERO a las 14 horas.
El resultado de este encuentro se hará público en una entrada general de la sección EnoTiCias.
PODÉIS VOTAR EN ESTE ENLACE
ASUNTOS DEL CORAZÓN.
Como guía en la Capilla Real de Granada disfruto explicando quienes fueron sus arquitectos. Pero desde hace meses, al llegar a la tumba de Felipe el Hermoso, un hombre desde una esquina me guiña un ojo. Sigo contando que el corazón del noble nunca estuvo ni está junto a su esposa Juana y en ello echo toda mi pasión por ese paradójico asunto, mientras una mujer a empujones y gritos saca al individuo.
Hoy, el periódico local comenta la noticia de un cadáver mutilado. El hombre no ha venido. Sin embargo la mujer sí; con un pequeño paquete para mí.
Vamoooos, que me ponéis nerrrrviosooo (Alejandro, claro)
Jajaja, ya voy, ya voy. Es que tenía tres ideas en mente y solamente puedo escoger una. Como si de un examen tipo test se tratase, espero haber seleccionado la opción correcta.
ELLOS TAMBIÉN SE MAQUILLAN
Fiel reflejo del momento que atravesaba su vida, se movía arrítmicamente, sin rumbo, refugiada por la música y el alcohol. Echó una ojeada y clavó sus pupilas en un arquitecto, que dejó la chaqueta y los complejos en el guardarropa para zambullirse en ellas. Prometió diseñarle un mundo lleno de ilusiones y llevarla al castillo que aquella princesa merecía. Luego se aventuró a edificar una urbanización de risas con un jardín de autoestima a través de susurros, cuyo eco sería apagado horas después bajo las sábanas. A la mañana siguiente, ni él era arquitecto ni ella se veía tan hermosa.
Vaaale, no se admiten los empates, ya lo sé.
Suerte.
¡Buenos relatos!
Felicidades a los dos.
Votado.