29. Nocturno en do menor
La pequeña temblaba bajo el velo de una noche inusitadamente oscura. Incapaz de proferir queja alguna que acompañase al vaho de sus labios, intentaba descifrar las maniobras que su padre realizaba conforme iba despojándola de la ropa, cubierta de una escarcha grisácea y crepitante. Ni siquiera el halo de luz nacido a sus pies lograba reconfortarla del frío que le roía las entrañas. Y mientras ella se anegaba en la confusión, su padre seguía afanándose en desprender del vientre de su hija la esquirla de esa luna baja, redonda y grande que había prometido alcanzarle.
Estoy bastante desconcertada. En la primera lectura me he pensado que era un caso de abusos sexuales, influida por el título. Pero no me cuadra. Así que me lo he leído dos veces más y me ha venido a la cabeza, ahora influida por el relato precedente al tuyo, que se trata de un padre que acaba de rescatar a su pequeña de entre los escombros tras un bombardeo, y ahí me encaja todo más: «la ropa cubierta de una escarcha grisácea y crepitante» evoca cenizas y brasas, el «halo de luz nacido a sus pies» puede ser algún tipo de linterna, y el afán del padre por «desprender del vientre de su hija la esquirla», un intento desesperado de salvarle la vida. Sé que no te gusta explicar tus relatos, así que ahí lo dejo. Igual no he dado ni una. Un abrazo y suerte.
Eduardo, el relato me ha encantado. Mi interpretación es distinta a la de Ana, aunque la suya me ha parecido genial. Para mí, la luna baja es el reflejo de ésta sobre un lago o estanque helado y la niña al pretender alcanzarla se produce el accidente; su padre intenta socorrerla dándole calor. Seguramente ni me he acercado, pero poco importa, el mérito del relato es que produce interpretaciones y sensaciones diferentes. Abrazos y feliz verano.
Eduardo, ese padre quiere salvar a su hija de una tragedia que intuimos, que nos desvelas a medias con gran maestría. Poderosa imagen la de la esquirla de luna. Un abrazo.
Yo ya no quiero dar mi interpretación, porque añadiría más confusión, y, en realidad, va por la misma pista que mis compañeros: en vez de Do menor, pensé en La menor. Eso es lo bueno de los relatos misteriosos.
Un saludo
JM
Pues yo prefiero quedarme con la lectura literal-mágica y me ha impresionado la tragedia de ese padre que intenta infructuosamente detener la transformación de su pequeña en una luna-niña.
Pa que te rías.
Un abrazo.
Ahí va mi interpretación: debe ser muy bueno porque suena estupendamente, pero a mí me pasa como a la pequeña, estoy confusa; cuantas más vueltas le doy, menos me aclaro. Pero no me importa, me gusta igual.
Quería poner «debe de ser», aunque supongo que el subconsciente sabía lo que hacía… 🙂
Preciosas palabras para un relato un tanto confuso, con más de una interpretación. Ello no quita para que su esencia al leerla te guste.
Un abrazo Eduardo
El relato me gusta y creo que está perfectamente contado, pero será culpa mía, me cuesta encajarle un significado claro. Ya han hecho varias interpretaciones plausibles, no te dejo la mía, pero te digo que la historia que has contado te cala. Mucha suerte 🙂
Gracias por deteneros a comentar, Ana, Salva, Concha, Juan Manuel, Patricia, Edita, Mª Belén, Ana U., Juan Antonio.
Me alegra enormemente que todos digáis que, de algún modo, la historia os ha calado, al margen de interpretaciones. Como bien dice Ana Fúster, no me gusta explicar el sentido de lo que escribo, pues creo que toda creación es un misterio (mejor o peor resuelto, eso es cierto) que no necesita mayor explicación. Por eso disfruto del sentido que le dan otros, como vosotros gentilmente habéis hecho, y os lo agradezco.
Saludos.
Eduardo, bellas imagenes en una triste historia. Mi lectura coincide con la de Ana Fuster. Suerte y saludos
Gracias, Calamanda. Por tu comentario y por tus deseos para este relato triste, sí, y que me agrada que consideres bello. Saludos.
Cuentes lo que cuentes,la trayectoria del ritmo es impecable desde ese cuidado despegue con que inicias tu historia:» La pequeña temblaba bajo el velo de una noche inusitadamente oscura». La melodía de la frase avanza transparente con un movimiento sinuoso que se reparte administrado con inteligencia hasta que llega a cada punto y seguido. Musical, sobre todo. Incluso hasta la última frase hace el papel de inevitable Coda. Un abrazo
Muchísimas gracias por tus sonrojantes palabras, Nieves, pero la verdad es que has dado donde duele: que suene, que lo contado suene… Sin ser un purista (al menos, eso creo), ciertamente intento practicar ese principio de «la música ante todo» que dijo Verlaine. Aunque, como él, añado: «quedémonos con una canción gris, / que junta lo más claro a lo indeciso. […] ¡Lo que buscamos siempre es el matiz, / solo el matiz y nada de color!» Pues eso.
Muchas gracias por pasarte, Nieves. Un abrazo también para ti.
Lo que sí queda bien claro en tu relato es el gran amor y determinación de un padre que lo da todo por su hija. Y la sensación de frio y ausencia en ella.
Perfecto. Lo tuyo sí que es un microrrelato: no se puede decir más con menos. Muchas gracias por pasarte y por decirlo tan requetebién.
Pues como va de música yo he releído el relato imaginándome de fondo a Beethoven y gana, anda que no gana tu relato.
Gracias por tu sugerencia ambiental, Loren, la tendré muy en cuenta. Y gracias también por pasarte por aquí de nuevo.
Aprovecho para felicitarte, desde aquí, por la selección de tu relato «Amor platónico» en el concurso de Relatos con banda sonora. Lo leí en tu blog y me pareció magnífico, así que me parece justísimo que llegues a la final, en la que te deseo toda la suerte del mundo mundial.
Un fuerte abrazo.
Muchas gracias, Eduardo. En realidad, ‘amor platónico’ no fue seleccionado, ha sido uno esta semana titulado ‘marcha atrás’, pero me alegra muchísimo que te haya gustado ese relato homenaje a Bécquer.
Buen relato de amor y promesas difíciles.
Felicidades.
Gracias, María. Y magnífica descripción de mi relato: amor y promesas difíciles. Me gusta. Con tu permiso, me lo apropio.
Saludos.
Como se trata de un relato de sensaciones e interpretaciones libres, creo, a mí me has llevado de abusos sexuales a provocar el aborto en la hija. No sé.