31. Instinto (Lorenzo Rubio)
Una salvaje tormenta obliga al camionero a pernoctar en la primera posada que encuentre. Vislumbra unas luces verdes, que permiten leer La Isla. Se dirige hacia allí. Le llama la atención la tétrica fachada, más propia de una mansión encantada que de una fonda. Recela, pero entra.
Lo recibe una señora inexpresiva. “Debe de estar enferma”, piensa a tenor del extraño pigmento de su piel. La casera le ofrece una habitación con compañía. Él asiente. “No me vendrá mal un relax”, dice. Ella le da la llave y suelta una carcajada histriónica, que lo desconcierta. Cuando abre su aposento, una bella y joven mujer, desnuda, aguarda en la cama.
Sin rodeos, el macho comienza el apareamiento. Absorto de placer, siente atrapado su miembro, mientras la hembra se deshace del camuflaje; muta su epidermis a un verde clorofila; sus brazos crecen y nacen de ellos afiladas espinas; su cabeza toma forma alienígena, provista de enormes ojos y un par de espigadas antenas; sus omóplatos son ahora dos imponentes alas. Sin dejarle escapatoria, devora la cabeza de su presa, que aún copula, plácida, con su segundo cerebro erecto.
Al alba, no queda rastro del macho y los montes camuflan La Isla.
Lorenzo, terrible historia entre la mantis religiosa y abierto al amanecer. Según iba leyendo, se me ha invaginado, cual dedo de guante.
Un abrazo
Muy buena lectura, epifisis. Y has mencionado una de mis películas preferidas. Un abrazo.
Lorenzo, coincido con Epi. Cinematográfico relato. Saludos y suerte
Muchas gracias, Calamanda por tu visita y tu comentario.
Vaya imaginación amigo, eso casi sería morir en su ley.
Un abrazo y suerte.
Sí, pese a lo cruel, al menos ha muerto copulando y formando parte de la cadena alimenticia jaja. Gracias por pasarte, Moli.
Magnífico encaje con el tema del mes. Derroche de imaginación y de imágenes. «Su segundo cerebro erecto» frase divertida e ingeniosa. ¿Debo decir que me ha gustado?.
Enhorabuena Lorenzo.
Gracias, Rafa. La verdad es que has destacado mi frase favorita del relato. Un abrazo.
¡Hala! un argumento de peli de terror perfecto. Dan ganas de que sigas contándonos cómo eran los descendientes del camionero y la mantis. Suerte y abrazos.
A ver si Robert Rodríguez lo lee y hace una peli con él jaja. Qué buena idea, Eva, a lo mejor has puesto la primera piedra para una trilogía. Si tengo suerte, la hago!! Gracias por tus palabras!!
Mientras leía tu micro los pelo se me ponían de punta, menuda historia tan macabra, lo bueno es que el macho murió con las botas puestas y contento.
Le has echado muy imaginación, esta muy bien, enhorabuena.
Besos.
Puri
Sí, el macho fue tan decidido al tema que no se quitó ni las botas. Me alegro de que te haya gustado e influido como para erizarte. Gracias, Puri, por tu visita.
Loren, estupenda narración que pone los pelos de punta. Muy visual y con efecto. Intriga e inquietud hasta el penúltimo parrafo. Me ha gustado mucho tu mantisrelato. Suerte y un abrazo.
El mantisrelato, qué chuli, acabo de inaugurar un subgénero del micro. ¿Quién se apunta a hacer otro con una mantis de prota? Gracias, una vez más, Izaskun por tus bonitas palabras.
Terroríficamente bueno Lorenzo. Me ha gustado mucho. Un abrazo
Uy qué bien, yo recelé, pero me atreví con el bicho. Muchas gracias por pasarte por aquí, Concha.
Que no lo lea Stephen King que te lo plagia. Estos alienígenas son tremendos, cómo saben preparar las trampas, como para no caer. Has creado una isla donde dominan unos seres tremendos que saben llevar al límite las pasiones disfrazados de criaturas atrayentes para los varones incautos (que somos todos), un espacio barnizado de placer y dolor a partes iguales, y del que no se sale.
Suerte y un saludo.
Que lo lea, que lo lea!!! Señor King, le cedo los derechos. La verdad que las mantis religiosas son conocidas como los insectos alienígenas y es que no hay bicho que se parezca más al imaginario de aliens que Hollywood nos ha creado. Gracias por tu análisis, Ángel, te lo agradezco mucho.
Lorenzo, inquietante, terrorífico y divertido. El segundo cerebro, como siempre, a lo suyo, no se entera, jajaja. Muy, muy bueno. Abrazos.
Hola, Salvador, está claro el instinto del segundo cerebro lo tiene claro; él a lo suyo. Gracias por tu motivador comentario.
¡¡¡Sombrerazo!!! Y bien que lo sabía que estabas al lado, bien que te escuché ja ja ja (de modo histriónico). ¿O de quién te crees que venían los gemidos de la 666? Vaya nochecita que pasamos; a mí me tocó el saltamontes, vaya susto; tuve que saltar por la ventana, cuando me preguntó qué monte había que saltar para ir a Cuenca; no quiero ni pensar qué bicharraco te tocó a ti… espero que la araña de seda dorada que vi trepando por el techo no fuese, ¡¡vaya lagarta!!
Pero, Juan, a un hombre de mundo como tú no le debe dar miedo alimentarse de lo que sea. Viva el pulp, el weird menace y todo lo que he aprendido de un comentario del temido por el escarabajo Goliath, Juan Pérez, mientras esperamos a sus mujeres por estas tierras.
Hola, Loren.
A mí me ha recordado a Species, jajajaja.
Me da un poco de pena del pobre camionero, pero ¡hijo! es lo que hay. Hay que ver más cine de terror para estar prevenido.
Muy bien llevado y muy buena la frase final con la que cierras todo.
Te felicito y ya me voy a cenar.
Unos besos.
Buena memoria, Towanda, seguro que hay algún gen común. Tranquila por el camionero murió haciendo lo que más quería jaja. Gracias por tus dulces palabras.
Los bichos me dan repelús. Pero no creas, el camionero lo tiene bien empleado, por no pedir ni el carné a la chica que le esperaba desnuda en la cama.
¿Y si hubiera sido una menor?
No, el va a lo que va. ¿Pues no estaba tan cansado?
NO tenía dos cerebros, sólo disponía del segundo el primero estaba atrofiado.
Abrazos.
Toda la razón. Se comportó como un auténtico insecto macho. A mí la mantis me da mucho repelús!! Gracias por tu visita. Un abrazo.
Un poco asquito (bastante) ya me ha dao esto, ya. Tienen razón por ahí en eso de que tenía que (al menos) haberse quitado las botas!! Menuda insectora, cuando la pille Ender se va a enterar!!
Encima, y pa más repelús, ayer, mientras preparaba la declaración de la renta (miedito….) estuve viendo un documental de la 2 (toma ya!!) sobre la mantis. Que no sólo al copular se come al macho. También cuando tiene hambre de la otra.
Abrazo.
Buenas, Aurora, siento el hastío que te ha producido la actitud de ese personaje que ha demostrado pensar más, o solo, con su segundo cerebro (además pensaba incluso en señalar por ahí que su mujer e hijos dormirían plácidos en casa). Y comparto el repelús sobre este insecto, la de sustos que me he llevado con estos seres verdes. De todos modos, por mucho asco, repelús o todo aquello que puede dar la mantis nunca se podrá comparar con el terror que produce lo que has mentado: Hacienda. Un abrazo, Aurora, está bien saber todas las impresiones que causa esta metamorfosis que he traído en mayo.
Muy divertido, todo un homenaje a las pelis en las que la cosa acaba muy malamente. Lo de su otro «cerebro» me ha encantado…
Abrazos.
Jaja sí, Asun, creo que esa frase y el título resumen bien el relato, los personajes, la acción… Gracias por pasarte por aquí, campeona.
Lorenzo, muy cinematográfico tu relato. Da miedo, la verdad. No sé si será cierto, pero un viejo profesor contó una vez que si a un pollo le decapitas, sigue caminando. Pues a este pollo parece que le ha sucedido lo mismo. Claro que el tuyo juega con ventaja al tener dos cerebros.
Muy bueno.
Abrazos y mucha suerte
Jaja María Elena me ha hecho gracia tu comentario. La ocurrencia de los dos cerebros viene por el dicho ese que todos hemos oído alguna vez de que muchos piensan con la hembra del pollo y, sobre todo, porque es cierto que el macho mantis tiene dos cerebros y cuando la hembra le come la cabeza continúa copulando como si nada. Para que veas lo que da ver los documentales de La 2. Un saludo y un abrazo, maja.
Gracias, Ana, por tu lectura y creo que eso es positivo, poner el vello de punta, digo. Un abrazo.
Vayamos por parte, porque Señor Lorenzo, primero me ha inducido usted un estado de terror sin parangón para luego (leyendo los comentarios) embargarme de hilaridad y risas.
El relato es terrorífico (literalmente). No soy asiduo de este género y creo que escribirlo tiene mucho más mérito que enseñarlo. Muchas pelíciulas de miedo se sustentan principalmente en bandas sonoras, efectos de cámara y gritos inesperados (muchas otras no, claro). Quiero decir que ya de saque, atreverse a intentar dar miedo, nos remite a un escritor osado. Enhorabuena por serlo.
El ambiente se va construyendo con todos esos pequeñas pinceladas de elemento inquietantes (la fachada, la recepcionista…). Luego ya te desatas y montas un final que sube y sube (ahí como lector ya te has dicho a ti mismo que no lo dejas hasta que llegues al punto y final)y además lo rematas con esa idea tan bien traída («…sin dejarle escapatoria, devora la cabeza de su presa, que aún copula, plácida, con su segundo cerebro erecto.»).
Luego ya he pasado a leer los comentarios y entre lo del ínclito Juan Pérez y eso de que pensar con el femenino del pollo me habéis sacado para bien de esa inqueitud que has transmitido con el relato.
Creo que has conseguido que todos construyamos la imagen de lo que sucede en nuestra cabeza. Enhorabuena y mucha suerte 🙂
perdón por las faltas y las palabras mal construídas. O me compro un teléfono con la pantalla más grande o me quedo ciego XD.
Buenas noches, Juan Antonio, agradecerte en primer lugar el tiempo que te has tomado en desmenuzar el relato. Tienes toda la razón en cuanto a las desventajas frente al cine de los relatos de miedo. Este es un género que no me desagrada, aunque prefiero mucho más el thriller que el terror. Estoy también de acuerdo en que es una apuesta atrevida, lo escribí sin más pretensiones que seguir experimentando con nuevas propuestas; me apetecía hacer una metamorfosis, que la verdad me atrapan estas historias de cambios que experimenta un cuerpo humano mutándose en otra naturaleza.
Y bueno pasando a lo mejor de todo: los comentarios de este mes. Ir al libro no creo que vaya, pero lo que estoy disfrutando con todos vuestros comentarios ya ha valido la pena. Gracias por hacerme revivir el comentario de Juan Pérez, es todo un torbellino de risa; has conseguido hasta que me ría releyendo un comentario mío. Creo que, aunque no era tampoco mi pretensión, solo un poquito, que el terror y el humor casan bien, cuando no acaba en algo como Scary Movie, claro. Pues con lo dicho y el bicho te vuelvo a agradecer tu comentario y te digo que a mí me pasa lo mismo: escribo con el móvil los comentarios y después al leerlos ya publicados me dan vergüenza parecen escritos a veces por un niño de primaria.
Lorenzo… la culpa no es los niños de primaria.. es de sus profesores XDDDDD Te lo digo yo, que sé de lo que hablo. Un abrazo 🙂
Lorenzo, he podido ver a esa mantis-mujer transformándose, has logrado atraparme, envolverme…., misión cumplida 😉
Mucha suerte y muchos besos.
En efecto, si he conseguido eso, la misión no ha sido fallida. Gracias por todo.
Después de leer los mil comentarios precedentes, a cual mejor, sobran mis palabras. Pero no me voy a quedar con las ganas: lo he disfrutado.
Gracias, Edita, si lo has disfrutado, yo más con que te haya gustado, y no veas el camionero, pese a todo, también disfrutó. Un abrazo.
Sospecho que ese tono cinematográfico de tu micro lo has puesto con toda la intención. Me recuerda una vieja película (“species”) cuya primera parte me gustó mucho aunque sus secuelas fueron muy malas. Muy bien plasmado esa alienígena seductora, me gusta. Suerte.
Saludos.
Hola, Beto, pues supongo que me viene de que mis padres regentaron vídeo-clubs cuando yo era niño y de ver tantas películas algo se me habrá pegado. El cine me encanta, lo de buscado pues no lo sé, lo que sí es verdad es que pensé en que me había salido una secuela de Abierto hasta el amanecer, pero lo curioso es que me di cuenta a posteriori, en un principio ni me acordé de esa película que tanto me gustó. Gracias por tu comentario, Beto.
Madre mía, me he imaginado a mí mismo en esa habitación, con Salma Hayek encima, comiéndome la cabeza y… ¡Qué demonios! Me dejo.
Enhorabuena, me ha encantado.
Jaja Fernando, además has elegido una prota de Abierto hasta el amanecer. Buen dilema eh? Vivir o morir con las botas puestas. Gracias por tu lectura y comentario.
Aunque ya en el segundo párrafo nos adelantas algo, no me imaginaba lo que nos presentas en el tercero. ¡Madredelamorhermoso!, ¡pobre hombre!
Aunque me has puesto los pelos como escarpias, me ha gustado tu historia, leerte.
Un abrazo y ¡suerte!
Hola, Rosy, veo que es lo más comentado del relato, los pelos de punta, el miedo, etc supongo que todo menos la indiferencia es positivo, sobre todo, en un relato de este género, tal vez poco común en minihistorias, salvo en el mes de octubre con Halloween.
Lorenzo, un relato muy visual. Yo al menos no imaginé sino que pasé a ser testigo de esa escena tan erótica como macabra. Buen relato. Se me quedó corto. ¿Habrá más noches en ese hotel?
…
Saludos
Buenas noches, Montse, me alegro de que hayas podido visualizar lo que narré. Y es posible, no eres la única que me ha pedido la segunda parte, quién sabe creo que hay un mes que el lema es en aquel hotel de carretera, ¿atacarán las mantis? Un abrazo.
Has construido la historia plano a plano, como una secuencia de cine, muy viaual. Escogiendo además un genero que como bien dices es poco tocado. Muy original y bien construido. Felicidades.
Suerte y abrazos
Hola, Anna, pues por lo que parece casi todos habéis coincidido en que se asemeja a un miniguión de cine. Lo tendré en cuenta por si sale algún certamen de microguiones. Gracias por tu visita, Anna.
Tu relato tiene el aroma de esas películas de terror en las que una tormenta desencadena toda la trama. Y con el primer personaje solitario que inevitablemente debe sucumbir antes de den inicio los títulos de crédito al principio de la película. Para abrir boca, vamos. Me gusta la forma que has elegido para las alienígenas, y cómo se acaba camuflando la isla. Hasta que llegue el siguiente incauto. No lo dudo.
Suerte y saludos.
Gracias, Rafa, por tu comentario. Coincido en todo contigo. A ver si sale algún certamen de microcortos y lo mando. Un abrazo.
Da miedo, claro que peor debe ser lo que siente un albañil mientras se precipita al vacío. Muy bien contado, amén de moralizante, «de chicas nada». Me ha gustado lo de los dos cerebros. Suerte a fin de mes.
Gracias, Ximens. Esta vez opté por redactar un relato que no dejase muchas dudas al lector a la hora de interpretarlo. Un abrazo!