356. EL BOSQUE DE LOS SUEÑOS, de Halcón 2
Empiezo a descender la montaña,
la emoción me embarga,
sentimientos cruzados,
mezcla de olores, de colores y de sonidos,
las aves se comunican entre ellas,
dándome la bienvenida.
El mundo se para, todo el tiempo es mío.
Enfoco la vista al fondo, ya me queda poco, ahí está, regalando vida a todo lo que toca.
Parece brille más que nunca,
acaricia cada piedra que se cruza en su camino,
cincelándolas con el paso del tiempo.
En los claros el agua parece un cristal,
que me hace señales,
en las sombras algún rayo de sol se cuela entre las ramas de los árboles,
son linternas descubriendo los mil y un colores del bosque.
Me desprendo de todo,
el crujir de las hojas bajo los pies enmudece
al meterme en el agua,
está fría, muy fría, buena señal.
La luz que ilumina el maravilloso entorno
empieza a tintarse oscura,
remolón decido regresar,
desde la cima miro hacia abajo de nuevo,
pasa por mi mente la secuencia de imágenes
que horas antes he disfrutado,
me las guardo para mi,
me sale una sonrisa
agradecido por el regalo,
me despido… prometiéndome volver.