50. VACIARSE
Sentada en el bordillo del estanque, Candela se vacía. Gota a gota resbalan de su corazón a sus pies los pesares. No debió engañar a sus seres queridos diciendo que se iba de viaje; ni romper con Marcos por asegurar que la vida sigue. Alegrarse de la lumbalgia que impidió a su vecina visitarla y dejar que la desidia se cobrase todas las plantas de la casa, tampoco estuvo bien.
El agua es ya de un gris plomizo. Con el último «plof» se propone encender el teléfono, subir las persianas, despintar de azul la habitación y donar los juguetes.
Pero hay una gota que va creciendo conforme rueda hasta su vientre, que se detiene en su pubis y avanza hasta llegar a los pies, pero en lugar de caer, retorna diamantina hasta alojarse allí donde el corazón se tornó cuna.
Hola Yolanda, con tu relato tengo un problemilla. Me gusta lo que dices y como lo dices. Veo una tragedia, en forma de suicido, como si la protagonista se estuviera «desangrando», de ahí que se vacía. Me pierdo en algunas frases que pueblan el relato, sobre todo me confunde esto… «Con el último “plof” se propone encender el teléfono, subir las persianas, despintar de azul la habitación y donar los juguetes».
Espero la llegada de otros comentarios para esclarecerme un poco, y por supuesto que es culpa mía, que estoy pelín torpe, 😉
Un abrazo y perdona la franqueza.
Querida Rosy, gracias sobre todo por la franqueza, la agradezco.
No es problema tuyo, he querido transmitir el aislamiento de una madre que no llegó a serlo, ese plof es el sonido, de la metafórica gota del dolor del que intenta liberarse.
Ya me di cuenta que el texto no está claro, un tanto embarullado, no siempre acertamos.
Muchos besos y gracias por tu sinceridad.
Hola, Yolanda.
Hay una lírica en todo el micro que nos empapa. Veo un suicidio por un embarazo no deseado. Veo engaño hacia la familia, alegría de que la vecina no pudiese visitarla, quizá porque aquello fuera ya visible y tenía forma y color, por el azul de las paredes. Y hasta juguetes.
«El agua es de un gris plomizo», ¿porque ha atardecido? El título, que sugiere un vaciado, ¿no debería haber teñido un poco el agua de otro color? Bueno, esto es un ‘poner’ de mi cosecha. Este segundo párrafo me hace perderme un poquito.
Abrazos y suerte.
Yolanda, también me ha pasado como te cuenta Rosy. percibía lo del embarazo y las mentiras que me dieron la impresión que se volvían en su contra. Con tu aclaración, me parece precioso tu relato. Y bueno, a veces no estamos del todo al cien por cien. Suerte guapa-
Besicos muchos.
Gracias por el apoyo, amigas. Siempre estáis apoyando, hasta cuando las cosas no salen bien.
Abrazos enormes.
Yolanda, un relato precioso, lleno de imágenes sutiles que nos van mostrando porqué sufre la protagonista, ya que el motivo de sentirse vacía es por la pérdida de ese hijo antes de nacer. Es muy poético y me han emocionado especialmente las últimas palabras del relato «allí donde el corazón se tornó cuna».
Enhorabuena y mucha suerte.
Besos apretados.
Un final bellísimo. Muchos abrazos cálidos.