668. CORZA, de Lobo 4
Cuando la escoba del agua barrió el invierno, nació una corza de rojo pelaje. El sol desperezó con sus rayos las ligaduras del frío y lamió la tierra. Los días madrugaron para sentir los cambios. Estalló la flor, olía a violeta y a romero. Las semillas de polen volaron como ingrávidos copos de algodón.
Con la bonanza en la mano del clima, la corza triscó en el bosque. Los árboles abrieron su toldo de hojas. Escuchó al mirlo en la bóveda forestal. Descubrió la espalda del sapo partero donde la hembra bordó sus huevos. El pasto crecía tras el largo sueño.
Cumplió el verano de tierna yerba. A las cálidas tierras, emigraron los pájaros. Los lirones se escondieron en sus madrigueras. Las ardillas en el hueco del árbol. La manada buscó cobijo pero la corza apuró los montes. El valle quedó vacío.
Madrugó el temible invierno. La corza notó de golpe el frío. Azotaron su cuerpo vientos del Norte. Los pájaros blancos de nieve se posaron en el suelo. Robles y avellanos perdieron las hojas. Los arroyos fueron cuchillos de hielo.
En el profundo silencio se oyó el lamento de la corza y el tenebroso aullido del lobo.
Micro cuento con planteamiento nudo y desenlace, escrito es delicado lenguaje lírico.
África