77. Maëlstrom (Eduardo Iáñez)
rostros conocidos irreconocibles ojos en blanco ojos muertos de pez frías medusas viscosas como la muerte bocas desencajadas que buscan el aliento de la vida gélidos labios yertos cenicientos rostros sin vida cuerpos amados entre dos aguas botellas de champaña al alcance de la mano copas de bohemia danzantes bourbon on the rocks entre los sargazos todos menos tú me hundo en la desesperación y en nuestro camarote 115
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Eduardo, bien ambientado este relato. Suerte y saludos
me sentí ahogándome en estas aguas oscuras y sin poder respirar porque no hay esperanza
muy bueno glu gliu glu
Ahí está innovando, casi un caligrama tu relato, se va creando un remolino en tu mente según lo lees con todas esas cosas mezcladas entre las aguas. Apuesta segura tu micro. Vaya crack estás hecho.
Apuesta arriesgada este mes, Eduardo. Lograda la sensación de asfixia al haber eliminado todos los signos de puntuación. Hasta llegar a los «cuerpos amados entre dos aguas» pensé que iba sobre el Titanic, a partir de ahí me lleva a un naufragio, en un amplio sentido de la palabra. Besos y suerte.
¡Qué inteligente! Comienzas en minúscula y nos dices que este no es el principio, nos adentras en un remolino de imágenes y nos sumerges en la desesperación de una búsqueda. Sin comas tenemos la sensación de asfixia, aunque la musicalidad de las palabras nos da cierto respiro. Muy bueno, Eduardo. Me ha encantado.
Y luego dicen que yo trato de innovar y llegas tú y me dejas a la altura del betún y te marcas una narración con diseño original y evidentemente muy trabajada y casi me quedo sin respiración leyéndola y me parece que es de lo mejor del mes y menos mal que no padezco asma porque hubiera necesitado el flu flu para recuperarme así que voy a coger aliento y volver a leerlo porque merece la pena al igual que ser tu mejor amigo y un abrazo gordo pa ti y ya acabé.
Gracias a todos, amigos ya entecianos y de otros lares, por la que viene siendo vuestra habitual y fiel visita; por vuestros comentarios, por vuestro tiempo, por tanto…
Saludos.
Para quienes no somos poetas, esta intervención tuya es genial.
Un abrazo y suerte.
Ufffff… respiro… Original forma de relatar, me ha gustado esa sucesión de imágenes que rápidas se exponen en tu texto.
como dicen los compañeros eres un innovador.
un abrazo Eduardo.
Debo aplaudir tu trabajo, verdadera orfebrería literaria. Sí que he sentido la angustia de estarme ahogando. Suerte.
buenooooooo este chorreo de palabras me ha atrapado hasta ahogarme
ainssssssssssssssssss
genial
¡¡¡No es chorreo!!! ¡¡¡Es remolino!!!
¡¡¡Aún me gusta más!!!
Muchas gracias también a esta segunda remesa de amigos entecianos, por vuestra generosidad y vuestros deseos. Abrazos.
Qué maravilla leer todas esas letras como atadas unas a otras. Se hunden todas juntas, mezcladas, como lo hizo el barco y sus haberes en el mar.
Suena a canción.
Eduardo, qué alejado de tu estilo habitual y qué bien te ha quedado.
Me voy a tomar un café a tu salud, ahora mismo.
Abrazo.