91. SOLUCIONADO
Remedios sentada de luto riguroso encima de la lápida que cubre el féretro de su marido va leyendo una y otra vez el epitafio que con tanto interés meses atrás le había encargado: ME VOY PERO ESTA VEZ NO VOLVERÉ”.
Entre dientes rumia un monólogo que aligera aquella situación:
—Claro que no volverás cobarde, yo me encargue de que “solo “vieran tus huellas sobre el vaso con el resto del cianuro, el suicidio fue el veredicto de la policía, tus problemas con el alcohol y el asco por la vida corroboraron esa sentencia.
Solución -además- definitiva, Puri.
Hay soluciones que son para siempre, de esas no se vuelve.
Gracias por dejar tu comentario
Un saludo Reve
¿A que lo iba a tener planeado la señora? Jajaja
Siempre es triste saber que la salida hacia la luz implica el fin de la otra persona.Saludos y suerte.
La situación terrible venía de lejos y el plan se fue fraguando al unísono.
En casos como este la salida siempre daña a una de las partes y esta vez le tocó a él.
Un saludo Mercedes y gracias por comentar
La mujer ha solucionado su problema, parece que para siempre.
Suerte
Actuó de forma tajante estaba cansada de aguantar sus amenazas ahora disfruta leyendo el epitafio.
Gracias Blanca por venir a comentar
Seguro que esta vez no volverá.
Un abrazo y suerte Puri.
Está más que claro que esta vez no,ahora si que cumplió su amenaza pero fue gracias a ella.
Un abrazo Moli y gracias por acercarte a leer mi micro.
Vaya, cómo las gasta la viuda asesina. Menudo premio por las bodas de plata…
Un saludo
JM
La viuda estaba cansada de tanta amenaza, ahora ya no habrá más, lo supo hacer bien, las bodas de plata las celebrará sola pero tranquila.
Un saludo Juan manuel y un gusto leer tu comentario. Gracias
No puedo evitar pensar que le has puesto el nombre adecuado a tu protagonista. Remedios. Ella puso el remedio, desde luego, y el asunto quedó como reza el título: solucionado.
Abrazos
El remedio y la solución estaban en las manos, algo que da la pauta para solucionar el asunto.
Un abrazo Izaskun y un placer recibir tu comentario.
Y pensar que puede haber más de una viuda como tu «prota»… Comienza el crujir de dientes.
Suerte, Puri
Hay alguna viuda enmascarada en la inocencia por la muerte de su pariente, pero mi «prota», estaba cansada de las amenazas y optó por una solución rápida.
Gracia M Jesus por acercarte a comentar.
Un saludo
Hay viudas que se las traen, como bien nos has contado. Grandes males, grandes remedios (como tu protagonista). Mucha suerte 🙂
Juan Antonio: la vida de esta viuda seguro que no fue un camino de rosas, por eso decidió ponerle remedio antes de que ella fuera la víctima.
Gracias por tus palabras, me alegró verte por aquí.
Una decisión tajante pero tal vez en legítima defensa por ese yugo que atenazaba su existencia. Muy buen relato, Puri. Abrazos.
Salvador las decisiones como esta llegan fruto de un pasado de terror y mal vivir,ella puso el remedio y así subsanar todo eso.
Gracias por pasar y comentar.
Te envío otro abrazo .