El barco no atracan en la ínsula habitada por 10 mil vírgenes. Los marineros están ansiosos por encontrarse con las chicas que les esperan en los prostíbulos de otro puerto.
María Jesús, interesante propuesta, abierta a muchas posibilidades. Me gusta, suerte.
Saludos.
María Jesús Briones
Las vírgenes siempre esperan o son esperadas, como deleite o negocio.
Me alegra que te haya gustado la propuesta.
Mil gracias
María Jesús, si me confirmas que el punto final te lo has comido a drede, me pondré las alpargatas y bailaré una jota en tu honor. ¡Qué bueno!
Un abrazo.
María Jesús Briones
Exacto omití el punto, para qué cada cual pensase…..
Agradezco tu lectura.
BLUESS
Muy bueno.
¿Y a qué esperan?
María Jesús Briones
Esperan a formar parte de tu imaginación Bluees
Gracias un saludo
Está claro que el que se acerque a leer tu relato lo tiene duro, pues o se lo inventa él o poca sustancia le saca (jeje). Reflexivo, que trabaje el lector. Ciencia ficción pura, ya no hay diez mil mujeres vírgenes, pero si las hubiera están esperando el barco para dejar de serlo. Si es que siempre están pensando en lo mismo, leñe. En fin, que lo que más me gusta de tu trabajo es que nos lo das a nosotros.
María Jesús Briones
Claro que hay diez mil virgenes, (niñas que apenas llegan a la adolescencia), agrupadas para él tráfíco a otros paises. También esas niñas pueden estar esperando al barco, para una obligada primera experiencia, economicamente sustanciosa para sus guardianes…
Y como yo hago trabajar las mentes, también acepto tu conclusión.
Agradezco mucho tu lectura
Salvador Esteve
. Un golpe de mar, y el grumete despertó.
María Jesús, cientos de finales para tu relato de inducción a la imaginación. Originalísima tu propuesta. Abrazos y suerte.
María Jesús Briones
Gracias por tu opinión y saludos
María Jesús Briones
Mil gracias Salvador. Tu opinión me ayuda a no desfallecer en la Isla Literaria.
Hasta la próxima.
Daniel Irazu
Este mes está resultado muy largo.
María Jesús Briones
Espero no te haya agotado mi contribución a la página.
Saludos
Daniel Irazu
No, desde luego que no me ha agotado. No me gustó la contribución, pero sí la respuesta. Tu contestación es inteligente. Saludos.
Coincido en todo lo que se ha dicho. Cada cual le pone su final y lo lleva por dónde quiere. Suerte con tu breve. 🙂
María Jesús Briones
Juan Antonio : Agradezco mucho tu dedicación a leerme.
Susana Revuelta
Ínsula y vírgenes, con tilde. La coma entre sujeto y predicado, de toda la vida.
Puedes corregirlo, a tiempo estás.
Bº Birruezas 41
San Vicente del Monte
942 70 50 91
www.senderodelagua.com
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El barco no atracan en la ínsula habitada por 10 mil vírgenes. Los marineros están ansiosos por encontrarse con las chicas que les esperan en los prostíbulos de otro puerto.
María Jesús, interesante propuesta, abierta a muchas posibilidades. Me gusta, suerte.
Saludos.
Las vírgenes siempre esperan o son esperadas, como deleite o negocio.
Me alegra que te haya gustado la propuesta.
Mil gracias
María Jesús, si me confirmas que el punto final te lo has comido a drede, me pondré las alpargatas y bailaré una jota en tu honor. ¡Qué bueno!
Un abrazo.
Exacto omití el punto, para qué cada cual pensase…..
Agradezco tu lectura.
Muy bueno.
¿Y a qué esperan?
Esperan a formar parte de tu imaginación Bluees
Gracias un saludo
…y esto es solo el principio…la mente se dispara…interesante tu relato abierto
Gracias Ana, Precisamente ese es su futuro incierto, ilusión o peligro.
Agradezco tu comentario.
Dejo a cada uno, el desarrollo de su fantasía.
Muchas gracias, por comentarlo
Está claro que el que se acerque a leer tu relato lo tiene duro, pues o se lo inventa él o poca sustancia le saca (jeje). Reflexivo, que trabaje el lector. Ciencia ficción pura, ya no hay diez mil mujeres vírgenes, pero si las hubiera están esperando el barco para dejar de serlo. Si es que siempre están pensando en lo mismo, leñe. En fin, que lo que más me gusta de tu trabajo es que nos lo das a nosotros.
Claro que hay diez mil virgenes, (niñas que apenas llegan a la adolescencia), agrupadas para él tráfíco a otros paises. También esas niñas pueden estar esperando al barco, para una obligada primera experiencia, economicamente sustanciosa para sus guardianes…
Y como yo hago trabajar las mentes, también acepto tu conclusión.
Agradezco mucho tu lectura
. Un golpe de mar, y el grumete despertó.
María Jesús, cientos de finales para tu relato de inducción a la imaginación. Originalísima tu propuesta. Abrazos y suerte.
Gracias por tu opinión y saludos
Mil gracias Salvador. Tu opinión me ayuda a no desfallecer en la Isla Literaria.
Hasta la próxima.
Este mes está resultado muy largo.
Espero no te haya agotado mi contribución a la página.
Saludos
No, desde luego que no me ha agotado. No me gustó la contribución, pero sí la respuesta. Tu contestación es inteligente. Saludos.
Coincido en todo lo que se ha dicho. Cada cual le pone su final y lo lleva por dónde quiere. Suerte con tu breve. 🙂
Juan Antonio : Agradezco mucho tu dedicación a leerme.
Ínsula y vírgenes, con tilde. La coma entre sujeto y predicado, de toda la vida.
Puedes corregirlo, a tiempo estás.