19. Debí quedarme callado (Ricardo González)
Paseará solo por toda la casa, me dijo. Pero ¿cómo es posible que aspire los rincones o tras las puertas? Me da que deberé acompañarle.
-Ese timbre no es de la puerta, huele raro en la cocina. ¡¡¡La leche!!!
Porqué no me leí el manual del microondas en aquel momento.
-¡Sacarina! ¿Dooonnnde estaaass?
Debí quedarme callado.
¿Dónde va el jabón y donde el suavizante y donde iré yo?
Debí quedarme callado.
¿El pantalón ha de tenderse por las patas o la cintura?
Debí quedarme callado.
¿Qué es pochar la cebolla hasta que pierda el orgullo? Se me ocurre leerle a Confucio o mejor, leerlo yo.
Debí quedarme callado.
¿Cuál es la presión correcta para que estas extrañas tiras de fregona empiecen a absorber y no al revés?
Debí quedarme callado.
¡Como se me ocurre pensar ahora donde terminará el manojo de pelos del desagüe de la ducha! Jamás los había visto. ¿Serán todos míos?
Debí quedarme callado. Yo no estaría sufriendo solo, ella no estaría gozando en aquel spa y, sobre todo, este laberinto tendría salida.
¡Anda que bien está pagando no haberse callado a tiempo!. Tomo nota por lo que me pueda tocar, que no está mal aprender en cabeza ajena.
Ingenioso relato, Ricardo. Y a fe que muy realista.
Suerte y abrazos.
Gracias Rafa. Cierto que debemos tomar nota.
Divertido relato,por suerte los hombres ya sabemos que es pochar la cebolla(en dos meses ya lo está) y que el robot de limpieza va por wiffi…o no?
Suerte Ricardo.
A mi no me duran tanto las cebollas y mi robot de limpieza tiene cable. Vivo en otro mundo.
Gracias.
Pues ya sabes, en comunidad no demuestres tu habilidad.
Esta hecho con tu mejor sentido del humor.
Un abrazo.
Dicen que mejor no hacer que hacerlo mal., uno se ahorra el trabajo.
Abrazo, amigo.
Gran relato. Yo cuando leí que que había que rehogar las hortalizas me puse a estrangular las zanahorias. No te digo más. Por alegría, por estructura, por atrevimiento, por cómo lo has contado… enhorabuena. Mucha suerte 🙂
Muchas gracias. Me siento alagado con tu comentario.
Ricardo, original y divertido este laberinto de ignorancia. A mí, te puedo asegurar, que no me hubiera pasado lo que a u protagonista, yo me hubiera callado, jajaja. Abrazos.
El pobre medita en su impotencia. Jamás lo reconocerá en público.
Historia costumbrista y muy habitual.
Un abrazo.
Jajajja, nada nada lo tiene bien empleado por vago durante tanto tiempo jaja.
Que lo sufra.
Abrazos y suerte
Deberá espabilar si quiere seguir conviviendo…
Gracias.
Eres de lo más original adaptando los temas impuestos. Este laberinto, que no de pasiones, sino de prisiones domésticas malvadas te ha quedado redondo. Buenísimo.
Redondo quisiera que me quedara (o como a Redondo). Puede que punzante si. Son vivencias propias y ajenas que dan para mucho.
Gracias Marcos.
Amigo Ricardo, me da igual si planchas bien o mal o si destiñes las camisas en la lavadora o pretendes pasar el aspirador con la minipimer, porque tu arroz con chirlas es impagable,caballero. Un beso
Conozco a uno (no es broma) que hacía los sandwich mixtos con la plancha y su sra. se enfadaba porque dejaba manchas en la ropa…
El hogar es un mundo de fantasías muy ilustrativo.
Un Besito, Nieves y cuidaos.
En un principio todo me ha parecido un juego de adivinanzas. Pero poco a poco me he puesto a analizar cada frase porque todas tienen su historia pendiente (eso de tender la ropa, suavizante con sacarina, robots alienígenas). Los apunto como temas de charleta.
¡Que todo el mundo lo sepa! En los tendederos «Marta» las sábanas solo se pueden colgar en el exterior.
Las próximas reuniones serán para discutir de ópera, ¿vale?
Ve preparando el tema.
Un abrazo.
Espero tener derecho a réplica cuando acabemos con la ópera.
¿Sobre música o sobre domótica manual?
¿He leído por ahí arroz con chirlas? ¡Me apunto!
Jo, Ricardo, menos mal que tu relato no es uno de esos en los que el aspirador se vuelve contra uno y lo aspira, al estilo Mortadelo. Claro, con un Rumba txikitín cualquiera se atreve!!
Un día te tengo que contar una anécdota que acaeció «asustando» las alubias. Ummmhhh!! Después de ese arroz sería buen momento!!
Abrazo.
Nieves no ha podido degustar ese arroz, habla de oídas. Si algún día se tercia,os lo preparo a ambas. El aspirador lo pasaré yo, lo tengo dominado.
Gracias, Aurora.
Poco a poco he confeccionado el relato robot del presunto inútil!! y me he reído mucho al hacerlo. Me gustó la originalidad del tema. Mucha suerte.
Saludos.
Ciertamente se necesita un análisis en profundidad. Salvemos la convivencia.
Gracias, Paloma.