AGO38. GLORIA, de Mei Morán
A saber cuántos vuelos habrían sido ya. Joven y gallardo, capitaneaba el escuadrón y los demás pilotos le seguían sin ningún signo de rebelión, ciegos en su confianza. Rizaban el aire con sus piruetas de alabeo y, a la vuelta, de cabeceo en una demostración de acrobacia única. Durante toda la exhibición dio muestras de un dominio perfecto de las artes de la aviación y del mando. Sin embargo, en un descuido inexplicable, uno de los pilotos abandonó la formación y se descarrió dirigiéndose a una deriva inexorable. Los esfuerzos para llevarle al redil fueron vanos. Inició un descenso en picado dramático, de consecuencias terribles. El general, preocupado e inquieto por haber perdido a uno de sus mejores hombres se revolvía en el duermevela delirante producido por las fiebres. El zumbido revuelto de los aparatos le perforaba la cabeza trastornada. Yacía decrépito, senil. Ni gota de aquella bravura con la que bombardeara otrora al enemigo y sus ciudades.
El manotazo salvador de la enfermera acabó con la mosca. Rabiosa, atronadora había cercado al moribundo toda la mañana. Él volvió a planear durante días. Ahora ya sin motor. En silencio. Soñando los colores de la bandera que dejaban las estelas de los aviones.
Mei, el vuelo de la mosca, signo de coincidencia, revive la historía de una vida repleta de aventuras extraordinarias, y pasa ante los ojos del moribundo, Dicen que suele ser así. Buen e inesperado final. Suerte y saludos.
Aquí el insecto provoca sueños que hacen revivir, el hombre moribundo aún tiene la capacidad de usar su imaginación aunque no sepa a qué es debida.
Muy buena historia Mei, con ese final de planeo en colores. Suerte.
Bella historia que hace rememorar al moribundo los mejores momentos de su vida. Aquí la mosca tiene un buen papel como protagonista. Suerte, Mei. Un abrazo. Gloria
Me ha gustado Mei y a mi me recuerda al militar japonés moribundo que recuerda los ataques con los aviones llamados mosquitos del ejército imperial nipón. Y también con las moscas necrófagas de la muerte, que rondan a los próximos a morir.
Un beso
Hola, Mei. Me ha gustado cómo has narrado la historia, cómo cambias el resgistro en medio de una frase para introducir al protagonista moribundo y su desenlace final sin los sonidos que interfieran en sus sueños/recuerdos. Excelente también la elección del título.
Suerte y saludos.
Esa ronda de la mosca y ese vuelo sin motor para retener recuerdos y seguir soñando.
Buen relato.
Suerte
Muy bonito relato Mei, tienes un estilazo escribiendo.
Mucha suerte!
Hasta a lo más intrépidos pilotos de guerra, a la hora de morir les rondan los recuerdos, los sueños y las moscas. Me gusta.
Abrazos
Muy buena puesta en escena de las moscas, qué pesadas se ponen y qué poca pena me da verlas cuando no pueden alzar el vuelo. Me encanta el quiebro del primer al segundo párrafo.
Un abrazo.
Hola mei, suelen gustarme todos los relatos que haces, incluyo este que acabo de leer que demuestran tu vitalidad y atrevimiento ante un papel en blanco.
Eres muy buena y tu manera de escribir tiene mucha calidad-
Suerte a tus dos pilotos…