126. Imágenes
Me adentro en un laberinto de altos setos, caminitos geométricamente trazados, solamente me falta encontrar un conejo corriendo de un lado a otro como en el cuento.
Avanzo y en el primer recoveco aparecen imágenes que titilan ante mí como si tuvieran vida propia, una niña saltando a la cuerda, juega y monta en bicicleta comiéndose el mundo en cada pedaleo. Sonrio alegremente.
Doy la vuelta y en la primera esquina, el corazón me dá un vuelco, que veo!!!!, mi primer beso, mi rostro ligeramente maquillado, suspiro con nostalgia ¡¡¡¡ qué época!!!.
Un nuevo sendero , escucho las voces de los niños que corren y saltan, sonrio agradecida a la vida.
Un camino estrecho, me detengo y asomo la nariz, un gran sofá me envuelve mientras leo y tecleo en un ordenador ultramoderno, miles de ideas sobrevuelan el espacio, respiro paz y saboreo esos instantes durante unos momentos.
Está ya oscureciendo, el sonido del silencio barre el entramado, busco la salida y al dar la vuelta, el futuro ya me espera iluminado bajo el reflejo de una inmensa luna.
A mi me ha gustado la forma en la que has descrito como las imágenes te sirven para inspirarte . Me ha parecido un texto ameno y ocurrente. Suerte en el concurso. Un beso.
Él laberinto de la vida que describes en tu prosa, muy bueno.
Un abrazo y suerte.
No hay más intrincado laberinto que el de la propia vida. Me gusta como lo has plasmado y el tono optimista se agradece. Mucha suerte 🙂
Que bonita forma de describir el laberinto de la vida.
Un abrazo
Bonito laberinto, me ha gustado lo del conejo.
Muy bonito y profundo. Quien tuviera la suerte de vivir dentro de tu laberinto……