DIC121. DICKENS EN LA ELIPA, de Conrado Santurino
Dicen que hace quince días vieron a Charlie Dickens dándose un garbeo por el barrio de La Elipa. Esto no tiene por qué extrañar a nadie, en este barrio hay gente leída de muy diferentes culturas y en cuanto lo vieron caminar por la avenida del Marqués de Corbera la gente comenzó murmurar, a hacer corrillos y a confirmar la evidencia.
– Sí, es él.
Y recordaron su cuento de Navidad, el de los tres fantasmas y recordaban muy claramente la presencia del segundo fantasma junto con el que aparecen la miseria y la ignorancia y los vecinos se dieron cuenta de cómo las cosas comenzaban a ser y vieron avaricia, corrupción y podredumbre. Ni siquiera hacía falta nombrarlos. Salían en la noticias de la tele o en la tertulias de la radio.
Los vecinos de La Elipa recordaron el tercer fantasma, aquel capítulo en el que la casa del avaro es saqueada y preguntaron:
– Con todos los respetos señor Dickens – porque en el barrio somos gente educada – ¿Tendremos que esperar mucho todavía?
Muy bien por la historia, la forma y el fondo. Has hecho una buena historia,cuyo final o no final es perfecto. Felicidades y mucha suerte.Abrazo.
Este si que me ha llegado, mas que nada porque la Elipa es casi mi barrio, (hay mi marqués de Corbera). Y como bien dices es un barrio de gente educada, leída, y sobre todo entrañable. De nochebuenas en familia.
Y también gente corriente y un poquito harta de la situación actual, por eso no me extraña que le preguntaran a Dickens sobre el tercer fantasma, yo en cuanto me lo encuentre se lo pregunto también.
Te felicito por tu imaginación y por la ubicación del cuento.
Feliz Navidad
Muy buen relato y un giro interesante para un cuento de Navidad.
Muy bien traído tu relato hacia la situación actual, mezclado con la magia de la Navidad.
Muy bien traído tu relato hacia la situación actual, mezclado con la magia de la Navidad.
Traer a Dickens a la actualidad, gran idea. Seguro que no le faltarían personajes y situaciones dignas de ser retratadas. Mucha serte.
Saludos
Muy imaginativo con ese paralelismo evidente entre los personajes de Dickens y la realidad actual.
Muy bueno.
Un abrazo.