105. El gran hombre
Eleonora Winkel contempló por última vez el cuerpo sin vida de su adorable esposo, el senador Borendar, ciudadano ejemplar de la Comunidad y gran benefactor implicado activamente en un buen número de causas sociales.
Se sirvió un trago largo de vodka con naranja natural y pensó en cual debería ser el siguiente paso que diese…qué hacer, dónde ir…
El padre de sus tres hijos, Henriette, Lucy y Mosses, presentaba una sonrisita extraña, como de sorpresa…tal vez relacionada con los cuatro agujeros de bala calibre 22 que ahora lucía sobre su traje de 2.500 dólares.
Los chicos sabrán arreglárselas, pensó en voz alta frente al espejo….Se atusó el pelo, volvió a maquillarse y dejó una nota junto al cadáver de su marido.
“ Nunca pude reconocer al miserable que me drogó y violó a mis 19 años…hasta ayer, cuando tuviste la brillante y cínica idea de alojarnos de incógnito en el mismo hotel donde cometiste tu crimen…y entonces lo vi todo, tan claro, tan absolutamente negro….tan aterrador como el hecho de haber convivido 40 años con quien tanto daño me hizo.”
Luego tras replanteárselo y avisar al sheriff, quemó el papel y salió de aquel lugar, sin maletas, sin bolso, libre… a pesar de todo
Salvador, una historia de venganza y engaño; con un final abierto, que da para mucho. Suerte y saludos
Gracias Calamanda
Lo has dejado para comenzar cualquier novela. Muy bien tramado todo. El personaje y lo que lo motiva son perfectos para con más palabras hacer crecer más la historia. Mucha suerte 🙂
Gracias.
Ciertamente, me encantaría tener la capacidad de escribir algo coherente e interesante más allá de 200 palabras
Muchas gracias.
Ciertamente, me encantaría poder ser capaz de escribir algo interesante más allá de doscientas palabras…una novela!
Engañada toda una vida,¡cuantos casos de esos!, resuelto sin tituveos y a empezar de nuevo, muy bueno Salva. Suerte
Gracias!!
Al menos, que uno de mis personajes no tenga dudas, ya que yo las tengo todas, bueno o casi….
La historia es estupenda y el personaje fuerte y con mucho potencial. Creo que ya te han dicho que este micro parece el comienzo de una historia más larga. Yo destacaría el título, muy bien escogido, como para hacernos reflexionar: ¿cuantos grandes hombres no son más que fachada, y cuantas miserias se esconden tras esos trajes caros?
Suerte a fin de mes y abrazos
Gracias por tus generosas palabras, de verdad.