JUL86. NANAS Y DIOSES MUERTOS, de Modes Lobato Marcos
» ¿ Te cuento un secreto ?
La semana pasada maté a Dios.
Sin anestesia.
Simplemente extirpé de mi alma el trozo infecto que había convertido en su hogar, y lo arrojé a los cerdos.
No, hijo mío, no me arrepiento.
Jamás le pedí nada, pero ¿ Qué ocurrió cuando lo necesité de verdad?
Me dio la espalda como una rata.
¡ No le defiendas !. Es un soberbio. Un maldito trilero que juega con cartas marcadas.
Sí. Ahora nos falta la luz.
Pero un día, no muy lejano, llegará la primavera. Y me pondré, de nuevo, mi vestido de flores. Y volveremos a sonreír. Te lo prometo, mi niño.
Ahora te cantaré una nana, aunque preferiría no hacerlo pues me duele muchísimo la garganta, pero comienza a anochecer y tú tienes que dormir.«
La mujer canta dulcemente.
Poco a poco apaga su voz, hasta convertirla en un susurro.
Después se incorpora y, caminando de puntillas para no hacer ruido, sale del cementerio.
Genial Modes, como de costumbre. Tu relato deja un poso de tristeza muy bueno. Voy a leerlo de nuevo 🙂
Mu güeno … mucha rabia contenida y mala leche, Modes…
ENHORABUENA!
Un saludo!
me gustan las irreverencias y las rebeledías contra dogmas y seres superiores.
Suerte
Y lo que relaja a veces …
Gracias por leerme y por comentar.
Un saludo.
Los dioses de los hombres tardan en marcharse, y, como el de la lluvia, nunca llega a tiempo.
Emocionante final.
Juan M
Al final es la eterna pregunta : ¿ Quién creó a quién ? ¿ Dios al hombre o el hombre a Dios ?.
Algo me dice que, desde que el ser humano tuvo conciencia de si mismo, los dos van cogidos de la mano.
Madre mía, vaya tema para una tarde de verano…
En fin.
Muchísimas gracias por leerme y por tu comentario.
Un saludo sincero, Juan.
Muy real todo el texto, a veces esperamos de dios aquello que los hombres no pueden darnos y claro el silencio es la respuesta,y por eso lo mejor es tirarlo a la basura, como se hace con lo que no vale.
Muy emotivo final y sorprendente.
Un saludo
Puri
El cerebro de mi protagonista simplemente no acepta la pérdida de su hijo.
Por eso habla con él, y discute, y le canta nanas…, pero a la vez tiene instantes de lucidez en los que sabe que el niño se ha ido, y ahí culpa directamente a Dios de habérselo arrebatado. Y por eso lo maldice. Quiero pensar que algún día asumirá la pérdida, recobrará la lucidez y hará las paces con su Dios.
Muchísimas gracias por leerlo y por tu comentario, Puri.
Me lo veia venir y no me ha sorprendido, lo cual no quita que me haya impresionado. Me ha gustado muchííííííísimo!!!!!. Perfecto, perfecto!!
A estas alturas me temo que resulta muy difícil crear algo nuevo, o simplemente conseguir sorprender en tan pocas lineas.
Entonces, no nos queda otra que aplicarnos en la narración y si te ha impresionado y a la vez también te ha gustado…prueba superada !
Sinceramente, gracias por leerme y opinar mes tras mes.
Un saludo sincero, Aurora.
Hay personas que dejan de creer, otras no han creído nunca… tu protagonista es de las primeras.
Tu micro me ha gustado mucho, te deseo suerte.
Un saludo
Rosy
Muchísimas gracias por leerlo, Rosy.
Saber que además te ha gustado es un bonux extra que anima mi mañana. Y no son palabras vacías.
Un saludo y gracias de nuevo.
Me encanta la ternura con la que está escrito…es fantástico!! Suerte.
Muchísimas gracias por tus palabras.
Eres testigo directo, día tras día, y es genial saber que estás ahí.
Te quiero.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Un frío intenso se ha apoderado de mi cuerpo a medida que leía el relato. La narración no aclara nada, pero me ha transportado a una tarde invierno, a un solitario cementerio. Me ha sugerido un cadáver luchando por levantarse para mitigar el dolor de su madre rota. Lo difícil que resulta salir del duelo de alguien tan querido, la debilidad de nuestras mentes. Un micro para paladear.
Enorabuena Modes.
Un abrazo.
Sagerao!!
Maldita sea Juancho ! Al leer tu comentario caigo en la cuenta de que acabas de escribir un relato con más calidad que el mio.
Un abrazo gordo.
Parecéis empeñados en no dejarme dormir. Magnífico final, cantinero. Un besito y mucha suerte.
Con auténticas ganas espero el nacimiento del tuyo.
Yo preferiría que no hicieras uno de nanas…ni de ranas.
Un beso, compañera.
Me ha emocionado. Nada hay tan terrible como la pérdida de un hijo y para mi gusto, lo has reflejado de forma magistral.
Enhorabuena,
En primer lugar, agradecer sinceramente que te hayas molestado en leer el relato.
Juro que me dejas sin palabras al leer tu comentario.
Con la mayor sinceridad del mundo te doy las gracias, Esther.
Muy, muy, muy agradecido.
Esa fase de duelo y negación está muy bien reflejada en el monólogo, y además me parece un sentimiento real y humano. El texto contraviene justo a lo que predica la iglesia: la resignación, la fe. Y lo consigue desde esa primera persona cercana y toda la crudeza de una madre desgarrada. Un micro potente.
Un abrazo.
Coincido totalmente contigo, Susana. Esa era mi intención . No sabes como agradezco que hayas leído el relato y te hayas molestado en dejar un comentario por aquí.
La lógica aplastante de tus palabras y pensamientos me deja sin palabras.
GRACIAS, DE CORAZÓN.
Valga la redundancia ,,,
Modes, de nada. Aquí estamos para leernos y aportar nuestras opiniones. Siempre que no haga mucho calor…
Ya que estás por ahí, una cosilla: no separes los signos de exclamación de la siguiente letra. Aunque ya sé que muchas veces es problema del sistema operativo y no del escritor.
Un abrazo.
Ah, el maldito sistema operativo !!!!
En cuanto le doy la espalda me la clava a traición. Es pérfido y maligno. Incluso lo llevé a una clínica de desintoxicación pero ,,,
Dios bendito, creo que me ha dado una insolación en la piscina municipal esta tarde.
Ahora en serio, Susana.
Gracias por tus opiniones y consejos . Otro abrazo.
Lo que tú interpretes, Modesto. Que no se apodere de ti el mal o por lo menos no del todo. Otro micro te has montado con la primera parte.
Un abrazo.
Este Modes si se pone, se pone. Leyendo este relato yo te votaba para alcalde. Por cierto, pienso que la madre sale del cementerio para ir a la farmacia a por unas pastillas para la garganta. Te deseo mucha suerte.
Saludísimos.
Imagínate los gritos que ha pegado la pobre mujer, durante toda la semana, desde el instante en que murió su hijo ( como para no volverse loca y no tener irritada la garganta ).
Jo, Barlon, yo no quiero ser alcaide, ni alcalde, ni vividor a cuenta del personal.
¿ Me puedo pedir conductor de submarinos ?
Un abrazo, amigo.
Que triste y desolador. Para una madre perder un hijo es lo más cruel que le puede pasar. También se siente traicionada, pero seguro que, con su pesar a cuestas, volverá a vestir con las flores de la primavera. Tal vez escuche la defensa que su hijo hace de Dios y halle un halo de esperanza, que no resignación.
Me ha gustado mucho.
Un saludo y mucha suerte.
Elena
Muchísimas gracias por tus palabras, Helena.
Yo también deseo que la protagonista vuelva a sonreír algún día.
Al igual que deseo que recobre la cordura.
No se quien dijo que ningún padre debería enterrar jamás a su hijo.
Estoy totalmente de acuerdo.
Un saludo y muchísimas gracias por haber leído mi relato . Y por molestarte en dejar unas palabras aquí. Gracias, Helena.
Supongo, Ana, que en este país la religión fue una inseparable compañera de viaje.
Entonces es normal que muchas personas tengan la imagen de un Dios en absoluto contemplativa. Estoy totalmente de acuerdo contigo en ese sentido. Si existe, desde luego es, digamos, bastante pasivo.
EL CONTEMPLADOR, como tú dices, me parece un término redondo para definirlo.
Muchísimas gracias por leerme y por tus acertados comentarios, Ana.
Huy, Modes, el segundo más leído de la semana. A ver si va a sonar la flauta…
Saludísimos.
Pues el que diga que no le gustaría ganar, miente como un bellaco.
Aunque a mí me parece dificilísimo, casi rozando lo imposible, estar entre los elegidos. Hay mucha y muy buena competencia por aquí.
Que nos vayan leyendo ya es un premio.
Un relato precioso y desgarrador. La nana aporta la ilusión de la madre por seguir junto a su hijo.¿Qué nana será?
Abrazos.
Pues el hecho de estar soltero, y no tener hijos, hace que el mundo de las nanas sea una incógnita absoluta para mí. Más allá del Duermete niño, duermete ya, mi mente es un vacío absoluto en este tema. Pero vamos, no me la imagino cantando algo de King África,,,
Muchísimas gracias por leerme y por molestarte en comentar mi relato.
Gracias de corazón, María.
He leído varias veces tu relato, y cada vez que lo leo me gusta más, me ha emocionado mucho, precioso, felicidades, ¿cuántas veces no hemos querido hacer lo mismo por un motivo u otro? Saludos desde mi rueca, mucha suerte, seguro que la tendrás. 🙂
Muchísimas gracias por tus palabras. Muchísimas gracias por leerlo varías veces.
Y por escribir aquí, en mi rincón.
Y por hacerme sentir que te ha llegado.
Sabes ? Al final el que se emociona soy yo.
No sabes hasta que punto es importante que alguien, de quien tengo unos recuerdos impresionantes por como escribía ( te recuerdo del 140 de Belmonte) , me diga todo esto.
De corazón, gracias, a ti y a tu rueca.
Un abrazo sincero.
Un relato profundo e intenso escrito con maestría.
Felicidades Modes. Mucha suerte!
Muchísimas gracias por tus palabras, Beatriz.
Eres tremendamente amable.
Un abrazo sincero
Me gusta la mezcla de rebeldía y dulzura de tu relato. Lo he leído varias veces. Impactante.
Muchas gracias por detenerte un ratito frente a mi puerta. Eres bienvenida.
Y saber que lo has hecho en varias ocasiones hace que te esté tremendamente agradecido.
Me alegra muchísimo saber que te ha agradado el relato.
Un abrazo sincero y de nuevo gracias, Belén.
¡Qué fuerza tiene el relato ya desde el primer punto y aparte! Eso es empezar fuerte. La rebeldía de las rebeldías a través de la desesperación de una madre. Me gusta mucho cuando ella misma explica que a pesar de todo su dolor tendrá fin.
Saludos y mucha suerte este mes, Modes.