17. EL INFLUJO DE LA LUNA LLENA ( Inés Z.)
Cuando Anatole hace el amor con Emilia, le habla en francés. Piensa que en su lengua materna podrá expresar mejor sus sentimientos; cree que así traspasará su piel, la fascia, los músculos… Imagina poder llegar a esa zona pura e intrínseca de cada uno: el alma. Emilia no le entiende; pero le gusta el sonido suave de una lengua que no es la suya.
Esta noche ambos miran al cielo. Ha llegado esa fase lunar en la que ella desaparece cuando todo duerme.
Emilia abandona la casita del cementerio envuelta en sombras. Se dirige hacia la calle San Lorenzo y tuerce a la derecha. Allí se arrodilla, posando sus manos sobre una tumba.
Pronto, los susurros que salen de sus labios son llevados por el viento a través de los cipreses. Un aroma balsámico le precede. Él llega. El cuerpo de Emilia se desvanece.
Anatole sale de su escondite tras un ángel de piedra. Recoge el cuerpo de Emilia y lo devuelve a casa. Debe cuidarlo hasta que la luna cambie y ella vuelva.
Recostada sobre la cama, así, inconsciente, Anatole la mira. Siente celos del marido muerto. Sabe que por mucho que ame ese cuerpo, jamás poseerá su alma.
El tuyo sí que es original. Me gusta.
Muchas gracias, Edita. Un placer gustarte.
Abrazos!
Poseer un cuerpo es fácil; pero me pregunto, el marido ¿Sería merecedor de tal amor?. Buen relato. Suerte. Un abrazo.
Yo creo que sí, María. Pienso que Emilia y su marido eran almas gemelas, por eso ella le atrae con sus ritos.
Gracias por pasarte.
Abrazos!
Ay, las almas y los cuerpos, qué manía tienen de ir cada uno por su lado. Pero no hay que ser tan exigente, oye, más vale cuerpo que nada.
Bromas aparte, es un relato con un deje del Romanticismo, con la luna llena sobre el cementerio, el ángel de piedra, los cipreses, el desvanecimiento, esa languidez que todo lo cubre como con una capa fina de ceniza… Muy bonito. Un abrazo y suerte.
Gracias, Ana, me gustan tus descripciones.
Es que todos queremos lo que no tenemos.
Pobre Anatole, en lugar de disfrutar de Emilia, sólo puede sentir celos de dos espíritus que se aman.
Besos!
Sin duda, como ya ha dejado dicho Ana Fúster, un relato romántico donde los haya, con todos los elementos necesarios y la insatisfacción más radical como centro. Creo que has captado muy bien esa atmósfera y esa mentalidad.
Enhorabuena, y suerte.
Muchísimas gracias por pasarte y comentar, Eduardo.
Un abrazo!
Ambiente romántico para dos relaciones diferentes la del cuerpo y la del alma con su difunto marido. Original y poético.
Un beso inés
Gracias, no sé si llamarte Mateo, lo siento si me equivoco 🙂
La verdad es que este micro se me ocurrió hablando con mi prima sobre un cementerio de París… Aunque el cementerio de mi cuento no es parisino…
Un fuerte abrazo!
Inés, como el influjo de tu hotel en el mes de julio no deja hacer comentarios te hago aquí un 2×1, jajaja. El relato del hotel me ha parecido sobrecogedor, me imagino las distintas habitaciones esperando a ser liberadas, buenísimo. El relato de tu luna me ha recordado al romanticismo oscuro y gótico, me ha gustado mucho. Abrazos y suerte para ambos.
Gracias, Salvador, por este dos por uno jajaja. Me gustan mucho los lugares abandonados, creo que están llenos de misterios y el tema del mes me parecía el idóneo para hacer un homenaje a tantos lugares perdidos, algunos verdaderamente hermosos.
Y qué decir de mi cuento romántico-gótico…, disfruté tanto escribiéndolo que ya les he cogido cariño a los tres protagonistas.
Abrazos, Salvador!
También en los cementerios hay enterradas bonitas historias de amor. Me gusta la ambientación del relato y la idea de esa alma poseída por el espíritu del esposo. Buen micro, suerte. También me gustó mucho su relato del mes pasado.
Saludos.
Gracias, Beto, también por duplicado. He disfrutado mucho escribiendo ambos, son temas que me atraen y me gustan…, eso, y que la luna invita a imaginar historias de amor…
Abrazos, Beto!
Historia de amor absolutamente gótica, y con una intensa niebla de las leyendas de Becquer cubriéndolo todo.
Relato con personalidad, narrado con maestría, y teniendo la autora muy claro hacia donde se dirige en todo momento.
Y nos lleva con paso firme.
Y me dejo llevar…
Un besazo, Inés.
Gracias, Modes. Yo también me dejo llevar por tu comentario y voy directa a esbozar una sonrisa.
Un fuerte abrazo!!
Muy buena narrativa. Preciosa historia romántica, nostálgica, mágica. Me ha gustado mucho,Inés.
Gracias, Concha. No sabes lo que me gusta dotar de poderes mágicos a mis protas…, disfruto como una niña!
Abrazos!!
Gracias, Ana
Jo, no sé que ha pasado que no me ha salido el resto del comentario. No importa lo vuelvo a escribir.
Me hace mucha ilusión que te guste, y me encanta que te acuerdes de mi estrella.
Un besazo, Ana!
Secundo lo dicho por los maestros más arriba. Creo que has creado una buena pieza castiza romántica. ¿No te habrá poseído el espíritu de Zorrila?
Zorrilla, decía 🙂
Puede ser, Lorenzo. No en vano tengo este nombre 😉
Muchas gracias por pasarte.
Un abrazo!
Vaya qué casualidad, jaja, así cualquiera, a lo mejor te viene de familia y todo. Ala pues a escribir y continuar el legado…
Inés, el micro el principio tiene una sensualidad tremenda, a mí me da gracia porque cuando hago el amor me gusta hablar francés (estudié francés en Estados Unidos) pero después se pone triste con emociones muy profundas e humanas. Me gustó mucho creo que cada vez escribes mejor. Un fuerte abrazo, Sotirios.( Chiado Editorial me ha informado que mi micro Cálido Destripamiento ha sido entre los 15 finalistas. También está nuestro amigo Rafa Heredero. El 20 de septiembre anunciarán el ganador lo más probable que lo publican en un libro que se llamará “MADRID HISTORIAS BREVES “está en mi blog para que puedas leerlo)
Hola, Soti, hablas francés? Yo lo estoy estudiando ahora y tiene lo suyo no te creas jajaja
Gracias por pasarte y por la noticia de tu micro. Me paso ahora mismo.
Un súper abrazo!!!
En Estados Unidos estudié literatura Francesa y como entiendes lo hablo y lo escribo perfectamente (también domino el beso francés) Ja ,ja ,ja en esto estoy bromeando aunque todas las mujeres me llaman maestro (porque será) Un abrazo, cariño, y un día que aprendas muy bien francés hablaremos juntos, Sotirios.
Cómo eres, Soti, jajaja. Con ese currículum que tienes voy a tener que estudiar como una loca para poder hablar contigo en francés 🙂
Gros Bisous!
Bonita historia llena de dualidades imposibles. Me encanta esa reflexión final acerca de poseer un cuerpo pero no un alma. El relato luce y se ve muy trabajado. Mucha suerte
Gracias, Juan Antonio. La reflexión yo la veo muy cierta, se poseen tantos cuerpos sin llegar a rozar el alma…, sí, lo sé, soy una romántica 😉
Abrazos!
Inés, bonito y romantico tu cuento y sus tintes góticos. Suerte y saludos
Gracias, Calamanda, tengo que reconocer que me va lo Gótico…, aunque viéndome nadie lo diría 🙂
Un beso!
Me gusta Evanescente para definirme, tanto como viajar por historias misteriosas. Veo por lo que dices que te has dejado caer por mi hotel…
Gracias, Juan, El De La Cripta, me encantan tus comentarios.
Un abrazo!
Me ha gustado mucho tu cuento, su ambiente, las emociones que describes… Soy Anatole, soy Emilia, soy ángel de piedra y soy aroma a ciprés.
Gracias, Isabel. Precioso comentario.
Un fuerte abrazo.
Una hermosa leyenda a la luz de la luna llena.
Me ha gustado mucho el relato Inés.
Te deseo suerte.
Gracias, José Ángel. Es que la luna da mucho juego.
Abrazos.
Todo dicho, muy bien contados esos amores lunados.
Felicidades.
Gracias, María. Por pasarte, por comentar y por la felicitación.
Un beso!