63. VELADAS PERFECTAS (Pulgacroft)
Paseaban cogidos de la mano, despertando sentimientos adormecidos, respirando el frío relente, llenándose de libertad, iluminando su fantasía con luces de neón…Tendían puentes que cruzaban ríos de infinito asfalto.
Luego, en el balcón, la luz tenue de la luna llena se filtraba a través de la copa de vino que acompañaba sus promesas, su deseo, sus silencios…
Norah Jones, Michael Bubble, Nils Landgren…La delicadeza de sus notas y la suavidad de sus compases ponían la banda sonora perfecta a esos momentos más íntimos donde las palabras daban paso a los besos. Entre beso y beso se iban desprendiendo de la superflua ropa interpuesta entre piel y piel; y sus cuerpos armónicos daban el sí en cada nota de sus dedos dejando que la imaginación llegara allí donde la música ya no podía oírse.
Mucho más tarde, rendidos, se iban a la cama con sus respectivas parejas despertando por la mañana a un nuevo día, a una rutina aburrida, patética, asfixiante… llevadera tan sólo porque, cada noche, el clic del ordenador encendía entre ellos una nueva velada perfecta.
Mucho lirismo en tu relato, para expresar una rutina.
Me ha gustado la forma en que lo has hecho
Suerte
Muchas gracias María Jesús!
😉
Muy bueno el contraste entre la poesía de lo prohibido y la resignada rutina.
Besos
Siempre se presta mucho más a la poesía lo prohibido que la rutina…cierto.
Besos Patricia!
😉
Yo lo hubiera titulado…EL AMOR EN LOS TIEMPOS DE INTERNET.
Una preciosa historia preñada de romanticismo, y genialmente ambientada en el mundo actual.
Tanta soledad, tantas decepciones, y aún seguimos luchando y esperando (Y DESEANDO) conocer a nuestra alma gemela.
Ojalá la realidad no mate ese amor.
Un beso y enhorabuena.
Pues es muy título Modes, pero creo que le quitaría un poco de sorpresa final no te parece?
Es la realidad cotidiana la que está muerta ya, más bien…
Besos y graciasss
😉
Una historia donde el romanticismo empapa cada frase, en unas descripciones preciosas de ese amor que les ayuda a sobrellevar una vida anodina y posiblemente insoportable en su aburrimiento. Esperemos que las alas que les dan sus sentimientos no los hagan lanzarse a volar, y se estrellen entonces contra la fría realidad, la del cristal que cierra cada ventana del ordenador. Besos y suerte.
Muchas gracias por tu comentario Ana, me alegro de que te guste.
Besosss
😉
Supongo que no a todos nos provoca lo mismo, pero provoca sensaciones y eso es bueno. A mi me provoca tristeza. La del engaño de la convivencia que ya no tiene sentido y se mantiene, vete a saber porque razones, las hay a miles me imagino.
Besos
La realidad muchas veces no tiene explicación, o tiene muchas y muy enrevesadas, a saber Javier…
Gracias!
Besos 😉
Tus protagonistas buscan la llama de la pasión a través de las teclas de un ordenador, relaciones rotas y vidas monótonas que solo se avivan con la luz de una pantalla.
Buen relato de una realidad que a mi me da tristeza.
Un beso Sandra.
Muchas gracias Mª Belén!
Otro beso para ti
😉
Muchas gracias Ana!
Saludosss
😉
Qué poetico y bonito. Aunque cuente una historia en el fondo triste, la rutina de los protagonistas.
Me ha gustado cómo lo cuentas.
Besos
Me alegro mucho de que te haya gustado Blanca.
Gracias!!
Besoss 🙂
Me ha parecido muy original, la forma como nos presentas a esta pareja de enamorados, con su copa de vino, su música, sus caricias, y al final… no tienen nada «real». Una decepción.
Muy buen trabajo. Enhorabuena.
Al final queda un gusto amargo y creo que no es el vino.
El Amor cibernético, creo que es más normal de lo que podamos imaginar.
Suerte. Un abrazo.
Un final perfecto para romper con esa idea de pareja perfecta que has ido narrando con un montón de detalles.
Un relato lleno de mensaje en el que creo que te has preocupado de poner cada palabra donde tocaba, cada idea, cada imagen. Me parece trabajado y además con la posibilidad de que cada lector le imprima la profundidad que desee. Creo que tiene mucha fuerza por lo que dices sin decir. Me ha gustado la manera directa de explicarlo. Mucha suerte 🙂
Nos estamos acostrumbrando a tener una felicidad virtual. Las reflexiones las dejo para los más inteligentes. Relato bien llevado con múltiples lecturas (yo al menos le veo varias). Enhorabuena, y suerte.