114. LUNA A LUNA, VERSO A VERSO
Sara era mejor poeta que puta, y eso que de esto último no andaba escasa de méritos. Las noches tempranas, después de cenar frugalmente, bajaba a la calle y se sentaba en uno de los bancos de la callejuela que desemboca en la plaza Maravillas. Era un primor verla. Tan hermosa.
Aleteando sus largos cabellos, encorsetado su cuerpo rotundo en su ceñido vestir, esperaba a que alguien se le acercase y pactase con ella el salario del goce. Por aquello de escapar a los reproches y a las miradas vecinas, el primer cliente no llegaba antes de la luna cerrada para citarse en duelo con la hembra. Y era sobre todo en esa deliciosa espera, cuando Sara solía imaginar jugosas y amorosas rimas que hubieran hecho palidecer, por insultante comparación, al mejor de los orgasmos.
Me has animado el día.
Aplausos entusiasmados.
Gran relato, Raúl. Muy poético. Me pregunto qué me desconcierta más, que las putas puedan ser poetas o que lo sean los abogados o los ingenieros.
Más aplausos Raúl. Uno se encariña con la puta, incluso intenta adivinar esos versos imaginados. Besos
Cuando alguien tiene un don, lo tiene y basta, sea para la lírica o para el deleite, y no hablo de Sara, que también, sino del autor. Enhorabuena.
Un saludo
JM
juanmanuelsanchezmoreno.blogspot.com
He visto que lo has colgado en el Face. Un micro de esos que parece que se han parido de un tirón. Genial.
Me ha encantado: por su ritmo, su léxico, sus contrastes, su poesía… y hasta por su fino humor.
Raúl, esta muy bien derribar muros con relatos como este. Suerte y saludos
Fantástico, de principio a fin.
Que rico para el verano. Muy buen relato Raúl, espero que gane. Besos.
Si es que para los poetas y las putas la rima es muy importante. Suerte Raúl.
La poesía está donde menos se la espera. Buen relato.
Suerte y abrazos
Dos trabajos para una misma profesión. (Sin ánimo de ofender) La crisis y el pluriempleo… ya sabe.
Estupendo, Raúl. Felicidades.
y se lo has puesto fácil al jurado. Ser puta o poeta es una complicada elección,
Mucha suerte querido
¡Qué comienzo y qué final! Dos frases rotundas, originales, geniales. Lo de en medio tampoco desmerece…
Buen relato, además divertido.
Felicidades.
Redondo. La primera frase te atrapa con ganas y ya no te suelta, te arrastra de la mano con cierta premura por saber en qué va a desembocar…y vaya desembocadura. Enhorabuena.
Chapeau, Raúl! Redondo.
Uno de mis profesores decía que la literatura era un corral de putas, y no le faltaba razón. Pero tu Sara, como buena profesional del placer, ha optado por la literatura como ocio, y no como negocio: sabia decisión.
Enhorabuena por tu subyugante micro, Raúl.
Raúl Ariza, un relato moderno, suelto. Un micro de esos que aún perteneciendo a este «género chico», tienen vocación de ser fragmento de novela. Y lo consigues porque en tan breve espacio nos das tiempo a engancharnos, a seguirte, a disfrutarlo y a aplaudir. Ya me has fidelizado, como dicen ahora.Cuando a un autor se le busca en las baldas de una librería …..es que algo pasa
Has sabido combinar la cruda realidad con la poesia.
Buen hallazgo.
Buena historia donde la puta y la poetisa comparten un mismo cuerpo pero distinta alma.
Me ha encantado leerlo, gusta hacerlo.
un abrazo Andres
Mejor no se puede explicar. Un uso del lenguaje pluscuamperfecto. Mucha suerte 🙂
Hola, Raúl, me ha gustado tu relato con un final apoteósico. Solo espero que comparta su literatura y que obvie las miradas tanto cuando hace gozar con sus poemas como con su trabajo. Estaría bien que muchas prostitutas salieran adelante vendiendo sus letras.
Dicen que de poetas y locos todos tenemos un poco…
Tu relato lo confirma. Muy bueno.
Un abrazo y suerte.