DIC99. NAVIDAD, de Marta Trutxuelo García
Sonrió. ¡Por fin una Navidad en familia! ¡Y mantenía su trabajo! Cerró la puerta y ante el contable se abrió un horizonte de interrogantes: ¿Cómo era posible? ¡Si hasta le había entregado su carta de dimisión al no poder cumplir los plazos! ¿Por qué su jefe habría ampliado la fecha de entrega del informe anual? Precisamente él, el implacable directivo para el que no existían horarios, ocio, ni familia. La nube de cavilaciones se disipó cuando el contable recordó que aún debía comprar los regalos navideños antes de tomar el avión rumbo a casa. ¿Qué habría pedido este año? Abrió su maletín y buscó el sobre que le había dado su hija para echar al correo…
La luz de la oficina del final del pasillo, la última que se extinguía con la jornada laboral iluminaba aún el atardecer en la tercera planta. El director volvía a abrir la carta que le había entregado aquella mañana con gesto apesadumbrado su contable; un sobre que contenía un papelito garabateado con una ingenua caligrafía: “Sólo quiero un regalo: que mi papi venga a casa en Nochebuena. Gracias. ¡Ah! He sido muy buena. Y mi papi también”. Sonrió. ¡Por fin una Navidad en familia!
La Navidad hace el milagro y el duende de la justicia pone las cosas en su lugar
La Navidad hace el milagro y el duende de la justicia pone las cosas en su lugar
Gracias por partida doble a tus comentarios!!!
Un abrazo
Marta
Precioso
Muchas gracias, Carmen!!!
Un abrazo
Marta
Marta, me gustó demasiado el final , estupendo relato. Te deseo feliz Navidad, Sotirios.
Muchas gracias, Soti!
Que pases muy buenas fiestas tú también!!!
Un abrazo
Marta
Qué preciosidad de relato Marta!. Más de uno está poniendo a su hijita a escribir una carta a sus jefes. Jejeje.
Me ha encandilado de principio a fin.
Un abrazo.
je, je… no estaría mal, verdad???
Gracias, Belén por tu comentario!!!
Feliz Navidad y que empieces fenomenal el nuevo año
Un abrazo
Marta
Vaya, qué bonito!!!!
Me ha recordado a esas películas de Navidad en las que se suceden estos milagros-casualidades.
Besos, Marta.
Pásalo muy, muy, pero que muy bien en estas fiestas.
Y mañana Santo Tomás. Vía libre a la chistorra y la sidra!!!
Gracias, Inés!!!
Ojalá estas historias se hicieran alguna vez realidad, fuera del celuloide y del papel, verdad???
Muxu handi bat!!
Estoy un poco empachada de txistorra, puaaaajjj
Feliz Navidad-Eguberri on!!!
Marta, estoy repasando relatos y el tuyo se me escapó. La ternura de una niña junto con el espíritu de la Navidad pueden hacer milagros y ablandar al más duro. Me ha gustado mucho. Abrazos y feliz Navidad.
Muchas gracias, Salvador!!!
Ese espíritu mágico pretendía captar y parece que lo he conseguido… me alegro mucho!!!
Un abrazo y feliz Navidad para ti también!!!
Marta
Marta, un relato emotivo y mágico, los milagros de la Navidad. Me ha gustado mucho.
Te deseo feliz año 2014.
Un abrazo
Gracias mil, María Elena!
Lo mismo te deseo, un fantástico año 2014 para que se realicen todos tus sueños!!!
Un fuerte abrazo
Marta