13. LAS 12 UVAS DE OHANES. (J.Redondo)
Las llaman también de barril. Pero no siempre, las afamadas uvas de “Noche Vieja” de Ohanes, fueron buenas. En el año del Señor de 1736, en este pueblo de las Alpujarras almerienses, hubo muy mala uva; no se sabe si por parte del alcalde Don Bartolomé Zancajo, por la del escribano Don Celedonio González o por la del más educado cronista de la villa Don Joseph Sancho Menjíbar, quien declaró, bajo palabra de honor, haber referido los hechos como ciertos.
El humilde maestro de primeras letras Don Zenón Garrido denunciaba, mediante reiterados oficios al alcalde, el más que probable colapso de la escuela dada la fractura que presentaba la jácena cenital del aula, advirtiendo sobre las consecuentes desgracias que pudiesen sufrir él y sus alumnos.
El alcalde porfiaba en acusar de alarmista al maestro, vituperando incluso la inútil profesión del magisterio. Los peritos, temerosos beneficiarios de las sinecuras del alcalde, corroboraban el alarmismo.
Dijo el cronista que, finalmente, sobre el maestro cayeron la maestra viga y sus alfarjías. El campo santo de Ohanes recogió los cuerpos de catorce niños y el del propio Don Zenón.
Las páginas de esta crónica, no tienen desperdicio. Leedla.
El tiempo transmuta tragedias en comedias.
Joder Jesús, duro final, pobre de los que allí estaban. Me gusta el ambiente y el vocabulario y el escenario escogido para tu apuesta mensual. Parece que no hicieron caso y al final mira lo que pasó.
Abrazos y suerte
No estoy seguro de que los hechos fuesen ciertos. Si lees la crónica sospechas que es un alegato a favor de sacar a esa España profunda del caciquismo y del desprecio por el aprender, origen de toda revolución. En su día esta lectura me impactó. También he aprendido mucho vocabulario arquitectónico construyendo este relato.
Gracias por tu comentario.
Jesús, pobres niños los de la escuela. Bonita historia, bonita ubicación, vocabulario acorde a la época, buen relato.
Un saludo
Hola Blanca. Ya tienes un ministro vitoriano. Buena gente y nada de patateros.
Gracias por tu comentario. Besos.
Hola, Jesús.
Pasa en tu micro lo mismo que pasa en la vida real. Que solo se ponen medios cuando ocurre una desgracia y que siempre los intereses particulares prevalecen sobre los colectivos… ¡Porca miseria!
Un micro estupendo, de lectura trepidante y con un meticuloso trabajo literario con un vocabulario que nos sitúa en época. Genial.
Mucha suerte.
Abrazos.
Pd: Un placer, conocerte el viernes.
Gracias Towanda. La verdad es que como este relato es el último del año me ha dado tiempo a retocarlo muchas veces y aprenderme denominaciones muy del Sur para vigas y viguetas. La crónica existe y es mucho más amplia y bien escrita. La parte divertida está en la redacción de los varios oficios al alcalde y las respuestas de éste en tono de sumario judicial y digo divertida porque estoy convencido de que esta desgracia no tuvo lugar, al menos en ese lugar.
Un beso. Y me resultó muy agradable conocerte. La próxima vez hablaremos más.
Un texto tan trabajado, al tiempo que impregnado de tu gran estilo personal, que hace olvidar que lo que se relata es una gran tragedia, pero ya lo dices al final, que el tiempo la transmuta en comedia.
Un texto más en tu colección que merece, como de costumbre, leerse sin prisas y con deleite.
Un abrazo y suerte
Muchas gracias Ángel por tus palabras. Que tengas feliz Navidad y que sigamos aquí el año próximo.
Muy bueno.
Gracias.
Un relato hecho crónica de una desgracia anunciada. Me gusta el ambiente, el vocabulario y las palabras que cierran la historia, le dan una gran categoría a la historia.
Un abrazo Jesus.
Gracias Belén.
Y ¿por qué me suena a mi esta historia como real? Cuando tenga un rato investigo, deliciosamente contada como siempre Un abrazo.
Te sonará porque fue no se si sainete o crónica real sacada a la luz hace años.
Gracias por tu comentario.
Qué barbaridad, ya no me acordaba de aquella tragedia de Ortuella. Que memoria más selectiva tenemos. La crónica a que me refiero es cierta como crónica tengo sospechas de que esto no ocurrió. Cuando vaya a Ohanes lo preguntaré.
Un beso, Ana.
Yo leí esta crónica y la puedes encontrar en internet y lo que he tratado es condensarla en las 200 palabras de rigor.
Ya me falta poco para terminar la primera parte de mi novelilla sobre Amescoas y Urbasa. Como hablo de cosas de la familia, tengo que pasarla previamente por la censura de mi mujer y mi familia política, no vaya a ser que origine un «Cristo»
Besos.
Jesús Alfonso, real o ficticia esta historia no deja indiferente. Su lenguaje cuidado le quita el hierro que pueden producir esos sucesos. Suerte y felices fiestas
Cala, feliz Navidad y que sigamos activos en ENTC el año próximo.
Una lección como siempre. Dices que has aprendido escribiendo este relato y te creo, el lenguaje es muy rico y novedoso para la mayoría de nosotros. Por tanto con la historia contada, al parecer cierta tal cual, nos enriqueces en todos los sentidos.
Una vez más un placer leerte.
La próxima vez que nos veamos tenemos que hablar mucho más. ¿Prometido?
Un abrazo grande.
Poco pudimos hablar es verdad. Estaba por medio el lago Sanabria y no nos podíamos escuchar.
Gracias por tu comentario.
Besos
La ambientación, el léxico, la historia… me parece un relato redondo escrito con muy buenas tablas (las que sin duda tienes). Me has traído a la cabeza esas entrañables crónicas del El Caso. Me has movido muchos años atrás (hasta recuerdos que debo completar con la ayuda de otros por ser yo demasiado pequeño). Mucha suerte 🙂
Te agradezco que dedique tu tiempo a comentar mis modestos relatos. Seguro que estas historias y otras tan trole taus o más que esta han ocurrido en aquella España primitiva. Aun hoy suelen suceder.
Feliz Navidad y que nos veamos el próximo año.
Jesús, la negligencia y la dejadez en las funciones no conoce épocas. Muy buen relato de una catástrofe anunciada. Abrazos.
Gracias Salvador. Feliz año y que pases una buena Navidad.
El tiempo transmuta tragedias en comedias.
¡Cuánta razón llevas, Jesús!
Pero me ha encantado lo de la «mala uva» del alcalde o del escribano, la construcción del relato, la atmósfera, el trasfondo. Unas doce uvas diferentes para este último ENTC de 2014.
Un abrazooo y Felices Fiestas para ti.
La frase de que el tiempo trasmuta… La he leído en alguna parte, no es mía. Felices fiesta y es para mi un honor que tan egregia reina del relato me dedique un minuto. Felices fiestas.
Alfonso, tu relato no tiene desperdicio. La mención de las uvas para ambientarnos, la de la mala uva para situarnos, la historia entre medias y la frase final genial, porque lo cuentas tal cual, parece una comedia.
Besos
Muchas gracias Isabel.Que sigamos aquí el próximo año y felices navidades
Destaco de este relato el estilo de redacción que asimila a lo histórico de la trama para crear una sensación de viajar en el tiempo mientras lees.
Muchas gracias Lorenzo. Que pases unas felices navidades y que nos veamos el año próximo en este blog o vis a vis.
Todo dicho, un relato muy trabajado y original, en el año del Señor de 1736.
Un fuerte abrazo Navideño.
Otro abrazo navideño para tí y muchas gracias por tu comentario.
Sigue así Jesusito. Muy bien.
Tu corrector de puntuación.
Un fuerte abrazo.
Qué bueno que hayas podido entrar en este blog. Muchas gracias por comentar este relato y por tu amistad que como sabes tanto aprecio. Feliz Navidad.