JUN07. ESPEJO, ESPEJITO PUÑETERO…, de Aurora Royo Cañadas
Últimamente estoy fatal. Miro mi imagen en el espejo y le pregunto:
¿Qué has hecho con mi amiga?. No, la verdad es que no me reconozco.
Ayer me armé de valor y le dije a esa persona del espejo -pensando que su compañía (a falta de pan, buenas son tortas) me serviría de acicate-: Vamos a hacer algo con nosotras.
Mi imagen -esa cosa horrible- me dijo con sorna: Hala, tira, a ver si se puede hacer algo.
Sin más, agarré el bolso y me fui a una peluquería nueva que han abierto, a darme un cambio de imagen. Resulta que no dan cita previa. Y me dice la peluquera que tengo que esperar un poco…
Una hora y cuarto, dos “Hola” y un “Lecturas” después, tímidamente, me atreví a preguntar si la demora va para mucho. A lo que me espeta la tía “que tengo que esperar un poco, que no sea impaciente”.
Así que mi gozo en un pozo, enfadada y humillada, volví a casa, con la misma mala sensación que al salir. En el recibidor, mi imagen en el espejo me esperaba con una expresión ya imborrable de mi memoria: ¿No te lo decía yoooo?
Te comprendo perfectamente, a mi particularmente no me gustaron nunca los espejos, por eso de mirarme poco, a veces ni me reconozco.
Besos.
Aurora no vuelvas a esa peluqueria y cuando tengas tiempo mantén unas palabritas con el espejo…seguro que la imagen no es tan horrible.
Un saludo y suerte. Simpático relato.
No se puede ser siempre superwoman y además tan exigentes… hay que relajar el nivel, seguro que tu personaje hace muchas otras cosas que aumentan su imagen y su persona, se lo ha dicho a su espejo???
Saludos y suerte
Me ha gustado, suerte. Nuria.
Pero Aurora, tú que eres la tercera mujer más guapa del mundo qué le pasa. JE,JE ,JE muy gracioso tu relato es agradable de leerlo. Un fuerte abrazo a mi amiga vasca, Sotirios.
Vamos a improvisar un remedio por ser tan poco caritativo: a Tu Mr. Mirror lo vamos a desterrar al Laberinto de Espejos de alguna confinada feria. ¡Que tengas éxito estival Aurora! ¡Ahí te van Mis Buenos Días de Domingo . . . J u a n P é r e z jugando a «la rata» !
Me gusta el revés de tu ironía, Aurora. Esos espejos no nos mandan más que una imagen momentánea. ¡Qué lástima que no nos recuerden cuando nos estamos comiendo unos pintxos en compañía de amigos y riendo hasta morir! Entonces serían ellos, los espejos, los que sufrirían por nuestra indiferencia. Créeme, hoy he visto un campeonato de triatlón, y había mucha envidia hacia mi barriguita.
Besos
Juan M.
Muchas gracias a todos/as. Casi me da pena que el asunto no sea autobiográfico, porque con vuestros ánimos se me habría quitado la depre de golpe, qué buenas personas sois.
Genial, muy femenino y directo. Rebosa frescura. Felicidades.
Yo hace mucho que ya no hablo con mi espejo, ja,ja,ja,ja, desde que empezó a parecerse al que nos has traído este mes ;o)
Suerte y un beso.
Aurora, pero que prepo eres, todos llorando por ti y ahora resulta que es mentira, que te lo has inventado y eres de pasarela.
De todas maneras lo que aguantáis las mujeres en la pelu, casi casi como nosotros para ver buen futbol.
Aunque sea mentira, me ha gustado.
Un beso
Hombre, despues de lo que te pasó en mi última visita al gimnasio…
¿o fue al dentista? es que como me pasa tanto…
Aurora… pues sí que es puñetero tu espejo, y respondón que te ha salido, no???
Muy simpático tu relato… me ha gustado!!!
Que tengas mucha suerte, eh??
Un beso
Marta