96. Romper la baraja – María Elejoste (Mel)
Mi primer joyero fue una caja metálica de Cola Cao. Era amarilla con dibujos de lápices y sacapuntas; mamá siempre intuyó la clase de tesoros que guardaría allí y la estrenó colocando dentro el abecedario con el que aprendí a leer. Yo fui añadiendo mis rimas y cuentos, las postales que enviaban las amigas en vacaciones y pegatinas del superpop. Años más tarde escondí también alguna estúpida y no correspondida carta de amor. Lo último que entró en la caja fueron los naipes con los que jugábamos al strip poker aquel verano de camping en Castro Urdiales. Una beca, un Erasmus y un contrato rompieron nuestra mano. El rey de diamantes emigró al extranjero para triunfar y a la dama de corazones se le partió un poco la esquina izquierda, lo justo hasta que volvieron a ser pareja y formaron su escalera de color.
Una llamada de madrugada habla de diamantes convertidos en cristales astillados y de corazones rotos. Ya no habrá baraja de plata. Mi as de trébol está negro de dolor y lo he regado con todas mis lágrimas. Necesito tan solo esperar la salida del sol y el tiempo lo volverá verde de nuevo. Adiós querido tahúr.
Precioso Mel. Me ha gustado mucho. Casi unas memorias custodiadas en una caja de Colacao. Enhorabuena y suerte
Evocador. Melancólico.Toda una vida repasada en tan solo esas veinte líneas. Imposible que cupiesen dentro de ese pequeño bote de cola Cao.
PRECIOSO.
Preciosa historia contada a través de los naipes de forma excelente. Me ha encantado.
Besos
Vaya, empezó bien la mano, pero ….
Enhorabuena y abrazos
Entrañable y evocador. Una joya guardada en lata metálica. Me ha encantado leerlo.
Me ha encantado.
Una historia redonda, llena de momentos nostálgicos, y tintes amargos , con unas imágenes visuales que se salen de cuadro.
Un abrazo, María
Eres la mejor, María!!!
BESO
Evocador como los recuerdos guardados en la caja de Cola Cao, María. Mucha suerte.
Mil abrazos.
Has contado la historia de toda una vida a través de unos naipes muy bien jugados. Mucha suerte 🙂
María, bonita historia que por su tema a todos nos toca un poco de cerca. Suerte y saludos
Me parece un relato muy original; hasta Castro Urdiales, impecable, tierno. Después entre tantas cartas me he perdido un poco, pero con la segunda mano lo he encajado todo… hasta el título; además, que no se preocupe la protagonista que hay muchos tipos de barajas el uno, la española etc siempre se puede volver a empezar a jugar.