MAY89. SUEÑOS EN LIBERTAD, de Cris Novoa Presas
Todavía resonaba en su cabeza el eco de la porra de los guardias contra los barrotes. El olor pestilente de las camaradas de celda, sus alientos infectos. Su vista aún no se había acostumbrado a la luz del sol y a mirar a lo lejos sin que se interponga un muro de argamasa lo suficientemente alto para encadenar su cuerpo fusionado a sus sueños.
Entonces miró el reloj, examinó su rostro en el espejo cochambroso de la habitación de la vieja fonda de su amiga La Paca. Se pasó el carmín por los labios. Ya habían llegado, era la hora, volvía a prisión.
Ella sabía que una vez que la infección del presidio irrumpe en su vida, ya no iba a desaparecer hasta carcomerle las entrañas. El bucle al que accedía, no tenía fin. Esta vorágine la tenía aterrada…
Su pavor llegó a tal extremo que le dolía vivir.
Por la mañana el guardia preguntó:
– ¿Qué le pasa a la princesa?
Y la reclusa de la celda de al lado contestó:
-¡Se colgó!
Su cuerpo se quedó allí, encarcelado, ese era su destino, pero sus sueños eran libres para siempre.
Muchas gracias, Ana, me alegro que te haya gustado. Luchemos por nuestros sueños por encima de todo.
Un afectuoso saludo.
Cris.
hola criss soy santiago y me gustaria cartearme con tigo y lo que surja
Crissssssssssssssss qué cuento tan vibrante! Me ha gustado besos Jero
Madre mía… te superas cada día más!! Genial!!