Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

Single Blog Title

This is a single blog caption

33. Recuerdos

Día 548

Querido diario:

Desde hace ya un año y medio, tal y como me aconsejaron después de diagnosticarme esta enfermedad,   uso tus páginas para escribir mis recuerdos, esos que poco a poco iré olvidando de mi memoria, entre ellos él que hoy he recordado al ver a mi nieto montado en bicicleta.

Aquel  día fue uno de los más felices de mi vida, mi padre regresaba tras varios años trabajando en el exterior. Mi madre nos vistió con la ropa de los domingos para ir a recibirlo a la estación de tren.

Tras varios minutos de retraso, el tren realizó su parada en el andén.  De él bajaron los pasajeros con sus maletas de maderas, entre ellos mi padre, que bajaba con lo que intuíamos que podía ser una bicicleta.

Aún esta enfermedad no me ha hecho olvidar como aquella «bici» nos acompañó  durante los años más felices de nuestra infancia para después quedar olvidada en uno de los rincones del desván de casa.

Me despido querido diario, pensado que quizás mañana este recuerdo lo haya olvidado y solo volviendo a leer estas líneas me haga creer que en algún momento lo llegue a vivir.

25 Responses

  1. Mª Belén Mateos

    Una enfermedad que barre todo recuerdo, una lucha por escribirlo y conservarlo entre esas lineas.
    Buen relato lleno de tristeza y memoria … quizás lograda.

    1. Nicolás Megías Berdonce

      Hola María Belén.

      Muchas gracias por pasarte a leerlo y dejar tu opinión, aunque este no es mi estilo, quería escribir algo más emotivo y lleno de sentimientos… Aunque no se si lo habré llegado a lograr…

      Un abrazo.

  2. Javier Palanca

    Me quedo sobre todo con la imagen del padre bajando la bici y la ilusión que uno imagina en los niños. Una bici era algo espectacular en otros tiempos.
    Abrazos

    1. Nicolás Megías Berdonce

      Buenos días.

      Muchas gracias Javier por pasar a leer y comentar el relato, la verdad que me hubiera gustado describir mejor esa escena, pero el límite es el límite y de algún lado había que recortar, XD XD…

      Un saludo.

  3. Ton Pedraz

    Enhorabuena Nicolás. Un relato cargado de fuerza, emotividad y nostalgia. Me gusta cómo describes la forma según la cual resulta posible llegar a convivir con esa terrible enfermedad.
    Te deseo suerte.

    1. Nicolás Megías Berdonce

      Buenas tardes Ton Pedraz:

      Muchas gracias por pasarte a leer el relato y dejar tu comentario.

      Un abrazo.

    1. Nicolás Megías Berdonce

      Buenas tardes:

      Muchas gracias Blanca por usar parte de tu tiempo en leer y comentar el relato. Esta vez he querido cambiar de estilo e intentar hacer algo con más sentimiento, que no se si he podido conseguirlo…

      Un abrazo para ti también.

  4. Una cruel enfermedad y un método bastante eficaz para revatirla. Ojalá consiga mantener vivos la mayor parte de los recuerdos en ese diario.
    Mucha suerte con este relato tan tierno Nicolás.

    1. Nicolás Megías Berdonce

      Muchas gracias Lorenzo por pasarte a leer y comentar el relato. Pues no hubiera sido raro que hubiera habido alguna incongruencia, conociéndome… 😛 😛

      Un abrazo.

    1. Nicolás Megías Berdonce

      Buenas tardes

      Muchas gracias Javier Ximens por pasar a leer y comentar el relato, muy buena tu pregunta…

      Un saludo.

  5. Sabina Casares

    Precioso relato Nicolás y malvada enfermedad que va borrando los recuerdos uno a uno hasta dejar la memoria vacía y a la persona desamparada :'(
    Solo la lectura de ese diario le acercará a aquello que estaba en sus recuerdos y que su enfermedad le ha hecho olvidar cruelmente.
    Me ha encantado 🙂
    Un abrazo.

    1. Nicolás Megías Berdonce

      Madre Sabina, leí tu comentario pero lo he ido dejando, dejando y se me había olvidado contestar… Muchas gracias por pasarte a leerlo y comentarlo… Me ha gustado mucho tu comentario, es lo que pretendía reflejar al escribirlo…

      Un abrazo…

Leave a Reply