34. SIEMPRE EXISTE UNA MANERA
El abuelo Fidel escuchaba muy atento cuando le contaba mis problemas con los amigos o cuando me ponía a llorar porque había sacado una mala nota. El tenía la gracia de solventar mis dudas de adolescente con una frase enérgica y con su voz que lo llenaba todo me decía muy serio:
-Tendrás que hacerlo a tu manera.
Después cuando me hice adulto y le hablaba de mis problemas de pareja, de las dudas sobre el matrimonio, de la idea de tener o no descendencia, me miraba muy fijamente y cada vez tardaba un poco más en contestar pero acababa diciendo entre toses:
-Hijo, tendrás que hacerlo a tu manera.
Rondando los noventa y tres, estaba el abuelo intentando entrar en la otra dimensión sin saber muy bien por qué puerta debía entrar. Recuerdo que me agarró de la mano y me obligó a acercar la oreja a su boca y me susurró con una sonrisa:
-No te preocupes hijo, tendré que morirme a mi manera. Aún no sé cual es, pero daré con ella.
Un hombre consecuente y con las cosas claras a lo largo de su vida, sabio de principio a fin, pues no hay mejor consejo que proclamar que cada uno debe seguir su propio camino, equivocado o no. Al final, se aplica su propia filosofía y predica con el ejemplo.
Un abrazo y suerte
Si el Señor Sinatra levantara la cabeza y viera todo lo que inspira ya no podría cantar a»su manera», cantaría a la muestra, no podría resistirse a tanta creatividad. Suerte.
Más que decir es hacer y el cumplió a rajatabla, excelente…
Un abrazo y suerte.
Qué hermoso relato. La congruencia en el hacer es el mejor ejemplo. Me ha gustado mucho. ¡Felicidades!
Pues sí, cada cual a su manera. Bien traído
Abrazos
Me gusta el tono que has dado a tu historia, profunda y al tiempo, le has quitado hierro, haciéndola amable a la lectura.
Te felicito, Estibaliz
Estibaliz, es buena filosofia, respetar y dejar vivir. Suuerte y saludos
Un hombre de principios el que nos has presentado en tu relato. La sabiduría está en los mayores, y tu protagonista, así lo ha demostrado. Consigues una lectura amena, e incluso desprender simpatía en esa situación límite cuando se ve llegar el final. Mucha suerte 🙂