23. Pelo natural
“Es un timo el crecepelo que anuncian por la radio. Ni siquiera brota pelusilla”, se dice mientras se pasa los dedos por la cabeza. Decepcionado, regresa a la farmacia.
—Este producto no funciona. Mire, continúo calvo como una canica —reprende a la farmacéutica y se lo devuelve.
La dependienta le propone cambiárselo por una nueva loción.
—Tome, llévese este crecepelo, es ecológico y totalmente efectivo.
El calvo, a regañadientes, coge la loción y vuelve a su casa. Tras la cena, se frota la crema por la cabeza y se acuesta.
Al alba, el canto de los pájaros y el zumbido de unas abejas lo despierta. Se despereza y nota como si respirase aire puro de la sierra. Entonces se mira en el espejo. Una sonrisa de oreja a oreja se dibuja en su rostro. Le ha brotado en la calva todo un frondoso vergel: hierba, bonsáis, flores de colores… Encantado con sus efectos, baja a la ferretería, compra unas tijeras podadoras y acude a la farmacia. Allí se corta el nomeolvides más bello de su cabeza y, eternamente agradecido, clava su rodilla en el suelo y le pide compromiso a la farmacéutica de las hermosas cataratas en sus ojos.
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Que bonitooooo!! Plas, plas plas, Lorenzo. Me encanta! Hasta dan ganas de dibujarlo. Enhorabuena, campeón. Suerte no, que lludontnid de eso. Besos.
Pues si alguien se anima yo encantado jaja, gracias, Eva.
Lorenzo eres un máquina qué imaginación tan cercana, tan de barrio y pequeño hábitat. Un beso a todos los calvos de paso. Abrazos suerte
Eso un beso a todos, gracias, Sr Montesinos.
Cuanta poesía Lorenzo, muy imaginativo.
Un abrazo y suerte.
Muchas gracias, Moli, por pasarte por aquí y leer. Abrazos.
El pelo no creció, hubiera sido un milagro, pero no menos prodigioso es que tu protagonista haya encontrado a alguien capaz de ilusionarle. Después de esto, el detalle de la vegetación capilar parece que tendría que tener menos importancia, pero no es así, pues es un simpático y logrado ejercicio de imaginación literaria, en la línea del realismo mágico.
Un abrazo y suerte, Lorenzo
Ángel, me está brotando un jardín en el bigote, ¿eso es grave? Jaja gracias por tu comentario.
Jaja qué bueno qué bueno un abrazo a los dos; esa casualidad sí que es realismo mágico. Muchas gracias, Sr Juan.
¡Qué gracia! No sólo me gusta, sino que me recuerda a un micro mío, menos simpático y más pequeño, en todos los sentidos.
Ays pues a ver si pasas el enlace que lo leamos. Gracias!
Ya que insistes… 🙂
http://palabradenoz.blogspot.com.es/2014/08/metamorfose-frustrada-metamorfosis.html
Me ha gustado sobre todo su despertar con aroma a bosque y su reacción. Otro en su lugar se hubiera desesperado, sin embargo, le han devuelto la vida en forma de frondoso vergel. Qué agradecido. Con esa hermosa catarata de la mujer podrán seguir regando la ilusión.
Muy chulo tu micro y muuu original.
Saludos.
Qué bonita ilustración tienes de perfil y muchas gracias por tus palabras.
Pues empiezas fuerte Lorenzo, este micro pide saltar al papel.
Me ha gustado ese bosque y el destino del nomeolvides.
Abrazo admirado.
Muchas gracias, Yolanda.
Lorenzo, imaginativo y calido relato. Suerte y saludos
Gracias, Calamanda, por tu lectura y comentario.
Si fuera yo un trompetero, de esos que se pasea por plazas y parques pasando la gorra, tu serías el increíble hombre orquesta, ese que lleva un bombo, una guitarra, una flauta, una acordeón y siete panderetas, y lleva un reguero de gente detrás, entregadas y dejándose las manos aplaudiendo sus serenatas. No hace mucho nos regalaste un abuelo entrañable, y esta vez nos regalas un calvo entrañable. Nunca pierdas esa magia escribiendo, Lorenzo. Mucha, mucha suerte 🙂
Jajaja gracias tu comentario es ya un micro, creo que va al libro, vas a meter dos relatos en el mismo mes, siempre batiendo récords.
Estupendo micro, Lorenzo. Una suerte que el producto publicitado en la radio no diera resultados; de lo contrario, nos hubiéramos perdido este maravilloso ‘vergel’ de palabras que has construido.
Un beso y suerte, compañero.
Gracias, Cristina, a ver si encuentro esa loción quién no querría lucir en su cabeza todo un jardín de rosas.
¡Qué bueno! Solo le faltan las mariposa amarillas de Mauricio Babilonia.
Felicidades
Qué comentario tan bonito e inteligente lo guardaré para siempre en el ventrículo de los recuerdos. Gracias.
Has creado todo un jardín en tu relato. Una maravilla de imaginación que nos hace sentir esa sensación de libertad, alegría y declaración de amor. Un revuelo de naturaleza en su cabeza donde la flor más hermosa es dada como prenda. Un Edén de bellas letras en las cuales me encanta perderme y leerlas de nuevo.
Un beso grande para uno de los grandes Lorenzo.
Otro comentario al libro. Si es que sois grandes en todo momento. Muchas gracias por tus dosis de lírica en este relato y besazo, M Belén.
Me encanta Lorenzo. Creo que daría para convertir tu relato en un cuento infantil. Por lo visual, el relato se ilustra por sí mismo.
Un abrazo y enhorabuena.
Ton.
Gracias por la idea la tendré en cuenta.
Qué lindo! Me encantó. Gracias, Lorenzo!
Gracias, María.
Ecológico y totalmente efectivo.
La farmacéutica tenía toda la razón. Seguro que conocía los efectos del crecepelo, como también es seguro que aceptó la flor.
Romántico, bucólico casi inocente. Me gusta. Mucha suerte.
Muchas gracias por tu leer y comentar, Virtudes.
¡Qué buen elixir!
Suerte a los calvos
Sería precioso que se pusiera de moda lucir selvas, jardines, vergeles en las cabezas ya sean calvos o no. Un beso, María Jesús.
Imaginativo, poético. Y esa imagen de la cabeza del calvo cuando despierta, es como para enmarcarla.
Me ha encantado, Lorenzo. ¡Suerte!
Muachas gracias, Patricia, y enhorabuena por llegar a la final de COPA, nada fácil.
Ay mi Loren, qué buenas letras. Cada vez mejores. ¿Qué puedo decirte? Que estoy loca por presumir de compartir espacio y escritura contigo. Genial el micro. Finísimo el humor, solete. Un fuerte abrazo y mucha suerte.
Muchas gracias, Izaskun, yo sí que estoy orgulloso de poder decir por la calle que te conozco: soy la envidia de Mallorca.
¡Bravo, Lorenzo! Estupenda historia, ésta que ha brotado de tu cabeza.
Saludos cordiales
Jaja me mola este comentario… original brotado de mi cabeza jeje Gracias por tus palabras.
Genial, Lorenzo, de calvo a frondoso vergel donde afloran sentimientos olvidados. Simplemente, tendrá que buscarse un apropiado peluquero, bueno, jardinero, jajaja. Abrazos y suerte.
Yo estoy por dejarme un poco de maleza en vez de perilla y unos cocoteros en la coronilla, ¿te apuntas a la moda, Salvador?
Estupendo relato, Lorenzo, rebosante de simpatía y con un final surrealista, cómico y romántico a partes iguales. Me gusta especialmente el suspense que creas tras la aplicación del segundo compuesto. Enhorabuena y un abrazo.
Buenas, Enrique, por estos parajes de letras… yo aún alucinando con tu relato REC que se quedó en el camino de Madrid. Un abrazo
Hola, Loren.
Vaya historión y menudo finalón que le has colocado.
Me encanta ese calvo!!
Un abrazote enorme.
Hola, marquesa de la literatura, una alegría leerte tus comentarios siempre. Abrazos.
Estoy buscando casa, ¿queda alguna en ese barrio? No quiero perderme lo que hará el frutero con las puntillas que le venda la dueña de la mercería.
Fantástico, Lorenzo.
Suerte y un abrazo.