MAR141. SÍSIFOS, de Isabel Martínez Barquero
Sobre la cubierta rectangular de un edificio desconocido, despierta y encuentra a su lado las ropas con las que ha de ataviarse. Son ropas extrañas, futuristas y de un ofensivo color naranja eléctrico.
A unos pasos, dos hombres terminan de vestirse, como ella, con prendas de color gris metalizado. Se acerca a uno de ellos, el que luce una barba canosa. Reposa la cabeza en su hombro al tiempo que le susurra: «Otra vez a empezar. ¿Dónde estaremos y qué año será?».
El hombre de la barba la mira con ojos tristes y antiguos. No la extraña, aunque no la reconoce.
La mujer siente un escalofrío. Sólo ella recuerda que los tres van a repetir la misma historia en otro lugar y en otro tiempo. Y es la primera vez que ella recuerda. ¿Cuántas veces han desempeñado el mismo teatro?
Qué surrealista, futurista y desconcertante.
Qué original relato! Te deseo mucha suerte para este mes Isabel!
Buenas tardes, me he quedado desconcertado con este relato… da mucho que pensar…
Enhorabuena Isabel y por supuesto muchísima suerte…
Muy críptico el mensaje. Pueden ser reencarnaciones, puede ser la máquina del tiempo, puede ser un teatro futuro, pero por qué uno recuerda y otro no? eso no se sabe.
Muchísima suerte.
Un abrazo.
Ad Infinitum…? Un abrazo, Isabel.
Un extraño relato, me ha gustado es muy original.
Un beso para ti desde Motril.
Me ha dejado un sabor extraño pero eléctrico. De nuevo vuelvo a leerte y me encanta.
Saludos
Fco.
Isabel, siempre me gusta y admiro tu forma de escribir.
Invita este texto a la reflexión. No sé si es que se cae en las mismas cosas y no aprendemos, si es que todo es cíclico y se repite y vuelve y revuelve, no sé, no sé…esa memoria tenerla o no, si hacemos lo de siempre.
Suerte, amiga mía.
Saludos
Anna J R
Extraña sensación deja ne la boca tu relato… Seremos máquinas rutinarias?
La memoria colectiva pertenece a la mujer.
Sabe bien de donde y hacia donde.
Un texto con varias lectura que demuestra lo escritora que eres.
Un fuerte abrazo
Tras la repetición constante se dan los saltos evolutivos, el casansio de siempre lo mismo ya es un síntoma de una nueva necesidad o demanda.
Abrazos Escritora!!!
Un relato muy bien llevado a pesar de la complejidad de su lectura.
Suerte. María Rojas
Muy bueno, da que pensar y deja una sensación de desasosiego. Además nos hace reflexionar sobre nuestros errores, que cometemos una y otra vez. No aprendemos. Un abrazo. Gloria Arcos
Cómo haces pensar sobre lo no dicho, Isabel. Ese repetir situaciones. Es muy intrigante y nos dejas imaginar qué teatro se representa, quizás las relaciones de padre-hija-pareja, no sé. Sin embargo hay algo distinto, ese ser consciente por primera vez. En fin, que te veo bien situada.
De una técnica impecable, el relato. Pero… no sé, o lo leo mal, o me pierdo… o es un ‘relato del absurdo’.
Saludos.
Santi.
Un relato complejo que invita a la reflexión. Muy interesante . Mucha suerte Isabel. Un saludo. Elena Sánchez
Me gusta el misterio y la interpretación libre…Saluditos Martha
Bellisimo el misterio que encierra el relato… El misterio de la vida… Quizas todo se reduce a volver a vivir, una y otra vez…
Un abrazo, amiga
¿Reencarnaciones? ¿Volver a empezar para aprender lo no aprendido hasta el momento?. Pensativa me deja tu relato Isabel. Pero maravillosamente contado. Un beso.
¡Qué de comentarios! No he podido leermelos todos porque no hay tiempo, salvo algunos y a grandes rasgos coincido con la originalidad de esta narración. Lenguaje sencillo y palabras que revelan desconcierto aunque tiene muchos significados.
Me gustan los dos con los que te has quedado tú, pero me lleva más la historia al castigo perpetuo del inteligente y vivaraz Síssifo que logró burlar hasta a la propia muerte y en dos ocasiones.
Un abrazo.
Como siempre, el genio de la Escritora Isabel, nos lleva desde el título mismo hasta el final del micro,a la reflexión que nos puede llevar a varias lecturas sobre la razón de ser del ser humano, la volubilidad de la mente, la fantasía y sus expectativas de futuro. Quizá todo esto sea la inmensa piedra que la humanidad, en nuestro averno, debamos empujar cuesta arriba hasta que podamos trascender y ser libres de todos nuestros pesados fardos morales, sicológicos y sociales.
Fantástico y gracias por reconocer la obra de mi querida amiga Isabel.
Saludos desde la Suecia que entra poco a poco a la primavera.
Me resultó inquietante, desde luego de muy libre interpretación y me quedé con la curiosidad de saber que les pasa. Suerte
Como el día de la marmota…historias que se repiten en un bucle casi infinito.
Me gusto el micro, me dejó intriga y muchas preguntas ¿qué? ¿cuándo? ¿por qué? supongo que ahora me toca a mi resolverlas una a una 🙂
Un saludo.
Terrible entrar en un bucle y, encima, darse cuenta de ello.
Me queda una duda tras la lectura: cuál es el motivo por el la mujer vive el bucle?.
No sería para pagar sus trapicheos y mentiras…
Suerte con el relato. A mí me ha gustado mucho.
Besitos.
Me gusta MUCHO la ambigüedad que presenta el relato, las puertas que deja abiertas a posibles interpretaciones, ese espacio, ese hueco que crea para que el lector lo rellene.
NO me gusta tanto la adjetivación en algunos puntos: «ropas extrañas, futuristas», por ejemplo, pues NO aporta nada a la ropa, son adjetivos abstractos, inconcretos…
Suerte, Isabel, en cualquier caso es un muy buen texto.
NACHO RUBIO
Un relato donde nos invita a reflexionar, me gustó. Felicidades Isabel y suerte.
Un abrazo