76. EL DOMADOR DE JARDINES (REVE LLYN)
El primer fonema que me salpicó era fricativo y labial. Saltó desde la repisa donde mi madre tenía el aparato de radio, atravesando con violencia la cuna y plantándose en mí. A él le siguieron muchos otros antes de que empezaran a agruparse formando palabras.
Ya con esa forma me llovían constantemente, yo las recogía a manos llenas dejándome empapar por completo. Entre ellas me sentía tan protegido como antes lo había estado en el líquido amniótico. Agarraba una tras otra y trataba de ordenarlas. Algunas, demasiado cargadas de hercios, me dejaban el cuerpo arrasado, yermo, como un domingo vacío. Otras, en cambio, crecían en mi umbría haciendo dentro un vergel.
Con los años aprendí su oculta genética, la razón de sus raíces, el eslabón perdido entre el verbo y los silencios. Dejé de comer, de dormir. Dijeron que me había vuelto loco y vinieron a buscarme. Con una sonrisa trémula me deje hacer. No necesitaba ya ningún aparato, allí donde fuera llevaba la radio puesta.
Locura preciosa, esta que nos relatas de forma magistral.
FANTÁSTICO.
Ton.
Desde el título a la última palabra (¿o debería decir fonema?) es un relato hermoso y lleno de poesía. Mucha suerte y un beso.
Parece que este personaje ha sido creado al menos en sus posibilidades léxicas por la radio y es que se aprende mucho de este aparato.
Abrazos con muchos fonemas y suerte
Una adicción y dependencia absolutas hacia las palabras que flotan en el aire, un mundo sin duda fascinante, accesible en profundidad sólo para unos pocos Quizá tu protagonista esté loco, pero al desentrañar el conocimiento total de los fonemas parece haber encontrado la dicha, nada más parece hacerle falta, como tampoco a este texto, lleno de singularidad.
Un abrazo y suerte, Evelyn
Un relato original y rico de mucha calidad.
Enhorabuena, Evelyn
Bendita locura literaria. Un relato salpicado de fonemas, ordenado de manera perfecta, cargado de imaginación y buen hacer.
Una historia bien trabajada y que me ha encantado leer.
Besos y suerte.
Muy poético y con un lenguaje esmeradamente cuidado.
Enhorabuena y suerte.
Locura sonora que sabe a poesía. ¡Genial!
Qué bonito, qué original y qué bien narrado. Es genial. Mucha suerte y besos.
Hermosa la locura cuando la poesía fluye como una voz en las ondas.
Gracias por el hermoso momento de la lectura.
Suerte.
LuisCar
Otra joya de la originalidad, estupendo Reve Llyn, un beso y suerte.
Evelyn, el poder de los medios y de las palabras, pareces decir con tu cuento y lo que supone si nos dejamos seducir por ellos. Suerte y saludos
Una lluvia de palabras y de sonidos que van fraguando la mente del protagonista, creando una simbiosis total con las ondas. Me ha encantado, Evelyn. Abrazos.
Hola, REve.
Qué original juego de palabras, de léxico relacionado con la radio.
Menudo trabajo tan bien hilado…
Te felicito, reguapa.
Besos
Un relato muy bueno. Y muy bien llevado en todos los sentidos. Me ha gustado mucho. Está todo tan bien cuidado y tan bien dicho que te deja ese poso de gratitud por que te lo hayan dejado disfrutar. Estará arriba. Mucha suerte 🙂
Tiene música y eso no es nada fácil de conseguir. Suerte.
Un relato precioso contado con buen ritmo.
Felicidades y buen tiempo.
La indeleble influencia de la radio que no se raya,»el eslabón perdido entre el verbo y los silencios», escribes. Hay que volverse loco por la radio. Y a mí, tu texto me vuelve loco por tierra, mar y aire. Tu microrrelato me ha «loqueado» en el mejor sentido de la palabra. Felicidades.
Un beso.