95. La abuela Paula
Hay noches que la abuela Paula, cuando cree que no la miro, remanga los puños de la bata hasta los codos y extiende al frente sus dedos arrugados como si acariciase el aire. Luego suspira y cuando me pone el pijama con sus manos ciegas me dice que la luna es una chiquilla caprichosa. Cuenta que es obstinada y poderosa, la luna. Y, que a pesar de no ser maga, su luz es capaz de hechizar a quien la contempla.
Algunas tardes cabecea con tristeza y me confiesa que la nuestra es una familia de navegantes con alma de croupier. Dice que la única culpable no es la luna aunque sea capaz de cualquier cosa con tal de ganar una partida a aquellos incautos que deciden apostar con ella.
Y los días en que el aire se vuelve tan pesado que se me atasca en la garganta, la abuela Paula me cuenta un secreto para hacerme sonreír. Hoy me ha dicho que el firmamento es un mensaje en clave escrito en Braille y que algún día, cuando lo descifre, ella también viajará al espacio para rescatar a papá y traerlo de vuelta.
Un micro muy sentimental, lleno de bonitas imágenes como: «La nuestra, es una familia con alma de croupier», y «el firmamento es un mensaje en clave, en forma de Braille». Puestos en boca de una invidente, el mensaje toma una fuerza brutal.
Te pongo un sobresaliente.
Hola, Izas.
Jolínes, qué bonito!
Me imagino esa imagen descifrando el firmamento y los brazos de la abuela Paula leyendo ese mensaje encriptado.
Un abrazo grandísimo y mucha suerte.
Encantador, tierno, y mágico. Enhorabuena!!
En las estrellas están todas las respuestas. Sabrá hallarlas e iluminar a los demás quien sea capaz de ver más allá que el resto, con un verdadero sexto sentido. Has creado un personaje entrañable y lleno de sabiduría, alguien que no debería ser ficción y a quien todos quisiéramos conocer.
Un saludo y suerte
Una familia de viajeros, cuyos miembros se extravían para nunca regresar. La abuela no pierde la esperanza y quiere recuperar a su hijo que fue atrapado por el impulso magnético e hipnótico de las estrellas. Como los antiguos navegantes de los mares, la abuela invidente cree descubrir en el cielo un mapa estelar que le dará la clave y la ruta para recuperar eso que tanto anhelan su nieto y ella.
Una historia llena de ternura y reencuentros estelares.
Saludos.
Entrañable, Izaskun. Las abuelas ponen su magia a todo…
Suerte y un abrazo.
Preciosa imagen la del firmamento como un mensaje escrito en braille. Todos los secretos en las manos de los que no pueden ver.
¡Mucha suerte!
Izaskun, tiernas y agradables imagenes en tu cuento. Consiguen trasladar y llenar de esperanza. Suerte y saludos
Caray con la abuela Paula y sus secretos, quien los pudiera escuchar eso día en que el aire se atraganta. Suerte y besote guapa.
Caray Izaskun
Tu cuento está cargado de magia. Qué bonito!
Mucha suerte!!!
Una maravilla de relato, Izaskun. He disfrutado leyéndolo. Mucha suerte y besos.
Me encanta el relato, tan lleno de ternura y de palabras encriptadas.
Abrazos primaverales.
Izaskun, qué bonita la historia y qué bonita las imágenes que nos regala el relato. Me ha gustado mucho y la manera como lo has planteado llega muy mucho al lector. Enhorabuena y mucha suerte 🙂
Son de los relatos que te atrapan (no me gusta porque hace que el mío tenga menos posibilidades). Es hermoso lo que has escrito, y si ya de por sí las abuelas molan, la abuela Paula es genial. Veo la imagen inicial con los brazos extendidos y al final averiguo que no es para abrazar el aire, sino para leer las estrellas en braille. Y ese final de cariño a la nieta, traer a su hijo para la nieta te remata. Suerte.
El sentido del tacto de la abuela se ha desarrollado tanto como su sensibilidad, una epidermis capaz de sentir el llanto del firmamento. Precioso relato lleno de magia. Abrazos, Izaskun, y mucha suerte.