123. In Vitro
Hace unos años el espacio cósmico reposaba tranquilo. Mientras en una galaxia, que crearon mamá y papá con las algas acariciándonos los pies, empezó todo. La materia se fue condensando para que una estrella diera luz. Pero el lucero moría antes de multiplicarse.
Tras peregrinar por un par de clínicas de fertilidad y después de muchos meses sembrando esperanzas en un huerto estéril, por fin llegó la mañana de la concepción.
Me inquietaste al verte por primera vez en la pantalla del quirófano. Eras una pequeña burbuja de vida. Luego se hizo el silencio mientras te transportaban en la jeringa. Una minúscula mancha blanca en el útero de mamá y un fogonazo de ilusión calentó la gélida sala.
A los nueve meses, mamá y yo te llevamos al mismo lugar. Esta vez ya podías oír los rugidos de aquel espacio cósmico.
…seis (una contracción), cinco (diez centímetros), cuatro (las lágrimas de mamá), tres (los nervios de papá), dos (tu cabecita), uno (big bang de emociones), cero (aterrizaje perfecto).
Julia bienvenida al planeta Tierra.
Bonito relato y màs cuando lo has vivido mucho sentimiento Felicidades al autor
Gracias. No serás mi hermana jajaja
Paco, bella historia terrenal contada con matices espaciales. Suerte y saludos
Muy bueno, como describes la llegada de una vida buscada hasta el vitro.
Eso si que es un viaje espacial.
Te deseo mucha suerte, Paco
Un parto que es un alunizaje o viceversa. Muy simpático e imaginativo. Suerte!!!
Hola, Paco.
Qué bonito nacimiento, qué bien has colocado todo, que me gusta mucho…
Suerte.
Muchas gracias a todos, desde mi espacio sideral.