87. PIÉLAGO (María Jesús Briones)
Había nacido en uno de los pedacitos de tierra que salpican el Océano llamado Mundo.
El destino lo hizo hombre, le llamó Tristán y la fatalidad le privó de piernas.
En la playa tomaba baños de noche al borde del agua, jugueteando con un tridente y su caracola preferida.
De la madreperla surgían acordes cuya sonoridad llegaba hasta el «Palacio Submarino». Allí preparaban los esponsales
de Nereida con Tibúr, príncipe marino, temido por su ejército dental de destrucción masiva.
La novia, aterrada por la voracidad de Tibúr, rechazaba, una tras otra, las colas nupciales incrustradas de corales y brillantes gambas transparentes. Emitía gemidos tan graves que arrastraron a Tristán a las profundidades.
Tibur custodiaba la entrada formando un muro con su aleta impenetrable. Al percatarse de la presencia del intruso, buscó sus extremidades y, al no advertirlas se revolvió hacia el tronco, sintiendo el peso del arpón, que Tristán alzó como un trofeo a los ojos de ella.
Nereida, emocionada, dio masajes y caricias a los muñones de él. Una larga cola crecía y crecía, hasta convertirlo en el tritón de sus sueños.
Agradecería que alguien me explicase la forma de aparecer con mi nombre, y no con el correo electrónico en los comentarios. Lo he intentado de todas maneras y me resulta imposible.
Mil gracias.
Hola María Jesús.
Prueba entrando en tu perfil y en el apartado «Nombre» busca «Mostrar este nombre públicamente». Es un desplegable que te permite elegir entre varias opciones.
Por cierto… Me gusta tu relato. Mucha suerte.
Un saludo.
Ya lo hice, y no sé como fijar mi nombre en el recuadro, porque siempre salta al Correo.
Gracias Manuel por tu interés.
Un saludo
Siento no poder ayudarte, Maria Jesús… seguro que aparece alguien que te lo solventa.
¡Una historia de amor PRECIOSA!
Un abrazo doble, por tu excelente micro y para que se solucione tu problemilla.
Una historia entre el cuento y la mitología, en la que se hace de la fatalidad virtud, pues la falta de piernas desconcierta a ese personaje amenazante el tiempo suficiente para que el protagonista pueda destruirlo.
Sobre el problema técnico, a mí me sucedió lo mismo y lo solucioné, aunque no sé si podré servirte de mucha ayuda. Pinché en algún sitio en el que se me preguntó la cuenta, nombre, apellidos, etc., una especie de formulario que rellené lo mejor que pude, siento no saber precisarte más. Seguro que antes o después se soluciona.
Un saludo y suerte.
Hola, María Jesús.
Me parece un micro precioso con esos aires de leyenda que tanto me gustan.
Te deseo suertísima porque la merece tu historia.
Besos enormes.
Sobre tu problemilla técnico, vete a editar perfil. Pincha sobre el ángulo superior derecho donde dice Hola, (nombre). Allí puedes arreglarlo, te lo juro por Snoopy.
Un beso gigante.
He seguido vuestros consejos y al fin aparezco con mi nombre.
Gracias a todos.
Besito virtual
Un relato mitológico de nereida y hombre que se hará sireno por el amor y los masajes. Un relato romántico y tierno. Suerte.
Qué mi relato, no le haya disgustado, es satisfactorio par mí, Sr. Ximens.
Saludos afectuosos
Estupendo frase de inicio para un gran relato que podría venir de alguna leyenda perdida en el océano.
Me alegra que hayas arreglado tu problemilla tecnológico
Mucha suerte
Gracias, Esperanza por seguirme.
Besito virtual
Para mí es una leyenda, no lo dudo él hombre que eligió ser pez en nombre del amor.
Me encantó.
Un abrazo y suerte.
Es que el amor, es el amor, Moli.
Mil gracias.
Es un precioso cuento mitológico, Maria Jesús. Me ha atrapado con su musicalidad y su ritmo. Un beso.
Me hace feliz, que hayas caído en mis redes,,,, literarias, Belén.
Un abrazo fuerte.
Enhorabuena María Jesús. Por tu relato precioso y romántico con final feliz. Te deseo mucha suerte.
Ton.
Gracias, Ton, por tus buenos deseos.
Saludos
Una bella historia que has conseguido que parezca leyenda. Unos acordes hechos letras y una musicalidad que hace seguir leyendo toto el océano de tu historia hasta su feliz final.
Me encanta tu apuesta.
Un beso María Jesús. Suerte.
Me hace mucha ilusión tu comentario, María Belén.
Otro beso para ti.
María Jesús, bellas imagenes cargadas de romanticismo las que ofreces en tu cuento. Suerte y saludos
Me ilusiona que hayas encontrado bellas imágenes en mi relato.
Un saludo afectuoso, Calamanda
María Jesús, me ha gustado mucho tu propuesta, que camina fluida al son de la leyenda convertida en un precioso cuento. Suerte y un abrazo.
Muchísimas gracias por tu bonito comentario, Marta
Otro abrazo para ti
Después de tantas sirenas en tierra se agradece la leyenda de un humano convertido en tritón, y además con final feliz. Un relato a contracorriente.
Suerte y saludos.
Es por aquello de la paridad, entre sirenas y sirenos (también llamados tritones).
Agradezco mucho tus palabras, Rafa
Afectuosos saludos.
Un cuento bordado de mitología, donde el destino es retado y vencido por el valor y el amor. Me ha gustado mucho, María Jesús. Abrazos y mucha suerte.
Lo de un cuento bordado de mitología, me ha llegado al alma, Salvador.
Agradezco mucho que me sigas siguiendo (valga la redundancia)
Saludos afectuosos
Mitología y amor: una buena conjunción con la hermosa selección de palabras que has hecho, María Jesús. Te felicito.
Un abrazo.
Precioso tu relato. Me ha recordado a muchos cuentos que leí de niña. Suerte.
Besicos muchos.
Si este «cuentito», te ha devuelto a la infancia, me doy por contenta.
Muchísimos besitos y besicos virtuales, Nani.
Qué historia tan preciosa, María. Y la has contado de la mejor manera. Me super encantó. Mil gracias… me quedé pensando que, claro hay quien puede librarse de un mal amor y de pronto recibir uno bueno al que incluso lo puede transformar enriqueciéndolo para bien de ambos. Wow… se lo mandaré a mi hija! Besitos y !suerte bien merecida!
Me alegra mucho que te haya gustado, y pienses que también le pueda agradar a tu hija.
Eres muy amable, María.
Besos mil
Hermosa historia con tintes de clásico. Lo que más me asombra, aparte de su belleza, es tu capacidad de síntesis para contar tanto con tan pocas palabras.
Enhorabuena, María Jesús.
Un abrazo.
Para mí es un honor tu comentario, Enrique.
Otro abrazo para ti
Aunque en otro mes, comento que me gusta tu relato colmado de ternura, don que nos viene a todos de maravilla.
Besos veraniegos y suerte.
¡Qué sorpresita tu comentario!, María.
Muchas gracias por molestarte en abrir lo que está cerrado.
Igualmente te deseo un verano lleno de buenas ideas y descanso.