ENE18. ¡TIERRA TRÁGAME!, de Abdalah Nieto
Un sonido estridente le despertó sobresaltado. Era la radio despertador que le había regalado su padre el día anterior por su decimoctavo cumpleaños. No sabe si le dolió más ver las 6.00 a.m. iluminadas en rojo o el frío que sentía en sus pies a pesar de dormir con unos calcetines de lana que le había tejido su abuela hace tiempo. Cinco minutos más evadido de mundo real no le harían daño a nadie, aunque cuando se quiso dar cuenta era casi la hora de entrar al tajo. Ya era mayor de edad pero llevaba casi dos años trabajando de soldador en el taller de la esquina. Con la piel de gallina se vistió rápidamente y con una magdalena en una mano y su vieja mochila en la otra salio corriendo de casa. Cuando llegó sus compañeros ya estaban embebidos entre los chispazos y los ruidos de la maquinaria. Se puso el mono e intento, en vano, ocupar su puesto sin que su jefe le pillara.
-¡Lo siento, pero estás despedido! Fue lo último que le dijo el encargado dándole voces a la vez que escuchó a su madre gritar:
– ¡Despiertaaaaaaaaaaaa, o volverás a llegar tarde al instituto!.
Un sueño hecho pesadilla que proyecta la dureza de un trabajo. Por suerte a esa edad es mejor tener que ir al instituto.
Recibe mis saludos.
Anna J R
Razón no te falta. Una pena que algunos chavales no lo vean así.
Saludos!!
Afortunadamente para nuestros políticos este chaval por el momento no engrosa las listas del paro. Divertido final. Suerte.
Y que siga así…
Muchas gracias!
Algo precursor. Si no hay disciplina desde pequeño, no la tienes de grande.
Aunque llega un momento en el que la disciplina ha de inculcársela uno mismo.
Saludos!
Me siento totalmente reflejada en tu micro, Abdalah. ¿Seguro que no nos conocemos? Como cuentas mi día a día tan bien… Odio mi despertador, corrijo: mis dos despertadores!!!!
Jajaja…mi consejo es que tires de martillo, aunque después tengas que comprarte otros dos. Pero te quedas de un agustito…
Un sueño en otro sueño. Me parece interesante, Abdalah. Suerte.
Muchas gracias.
Saludos!
Reflejas muy bien esos momentos en los que a veces crees ya estar despierto y hasta levantado pero luego resulta que seguías soñando. Me ha gustado el final optimista. Un saludo y suerte.
Muchas gracias.
Un saludo!
Una pesadilla muy normal, que además nos deja aliviados al despertar.
Suerte y…
Besicos muchos.
Muchas gracias y … besines varios!
La pesadilla de que te despiden del trabajo es hoy habitual en la mayoría de las personas. Muy bien narrado, me ha gustado el final optimista y lleno de futuro. Enhorabuena. Un abrazo.
Muchas gracias maja.
1 abrazo!
Puf, yo me preocuparía por tu protagonista… ya de estudiante sueña con tener un trabajo y con la pesadilla del despido. ¡menuda anticipación! ¿reflejo de nuestros jóvenes?
Jajaja, reflejo de la realidad. Si eso le ayuda a ponerse las pilas…pesadilla, bienvenida seas!!
Bien, se suele soñar así y también, se despierta de esa guisa.
Supiste reflejarlo.
Suerte.
Lines
Muchas gracias.
Saludos!
El problema es cuando la pesadilla es realidad y el instituto un cómodo sueño inalcanzable que ya no se repetirá.
Suerte con tu relato
Cierto es. Y por desgracia en el lado contrario estàn los jòvenes para los que el instituto es una pesadilla y trabajar un sueño.
Muchas gracias. Saludos!