DIC17. ¡QUÉ BONITO ERA EL MES DE DICIEMBRE…! de Marcos Santander Llona
Sobre todo su final. Desde principios a los árboles les salían unos frutos como luces, caros, muy caros, frutos para solo ver. Casas, tiendas, escaparates se poblaban de figuritas, bolas y copos de nieve que referenciaban una religión, la VER-DA-DE-RA, my friend. Tristura total.
Yo, en diciembre, también deseaba lo mejor a aquellos a los que deseaba el bien, más o menos como siempre, y lo peor para hipócritas automáticos que se encarrilaban a sabiendas, conscientes, de que después de diciembre estaba el enero de otro diciembre en este puto calendario de la vida. En la resaca de la conmemoración de esa otra religión laica y atea, preparábamos las fauces para deglutir, de manera pomposa, lo que días antes podíamos haber adquirido por la mitad de la mitad de la media vida.
La víspera era la apoteosis, y las bocas lentamente manipuladas iban desgranando dimes y diretes de sordomuda y corta felicidad, y el cura de turno se llevaba a la andorga el trozo de turrón robado de otros muchos hogares en los que iban sonando, a golpe de zambomba y pandereta, los sones de un hambriento villancico para celebrar que estábamos vivos, desde aquella Navidad, de niño. . .
Vaya, a otro que no le gusta la Navidad. Por fin no soy la única. Eso si, yo no hubiera ni en sueños podido expresarlo como tú. Esa mitad de la mitad de la media vida. Tremendo.
Eres un genio. Una crítica estupendísima y llena de poesia, que lo cortés no quita lo valiente. Suscribo, suscribo. Un beso.
Un abrazo.
Dice mi madre, que ha pasado ya 81 navidades, que deberías mandar este micro como carta al director de todos los periódicos, a ver si (cito textualmente) «todos esos sinvergüenzas se van enterando».
Gracias Aurora. Es verdad, odio la Navidad, odio el exceso estéril desde siempre ¿Qué decir en estos tiempos? Ciao.
(Ha habido un cruce en los comentarios)
Saluda a tu madre que con su edad tiene una experiencia numerosa, además de una lucidez envidiable. ¡Su propuesta me la pensaré!
Litereitor desde Cortilandia.-
Pero no empezó así la Revolución Francesa? O debiera. En principio, una declaración de principios a lo Atilasíseñor: títeres sin cabeza, árboles en bolas, curas de turno, navidad gore, como todas.
Contundente. Aluvión tejido con aciertos constructivos que desembocan en la lengua de una cascada poderosa que se precipita hacia un final demoledor . Primero nos capturas, y a continuación nos haces descender por el tobogán de la última frase construida de forma que no podemos salir. Espléndido final en avalancha . Técnicamente hablando, de lo mejor que te he leído. Cuando hemos acabado de leerte estábamos desprevenidos: nos has pillado con el turrón en la boca ( vamos a vomitarlo disimuladamente). A pesar de todo…..feliz navidad(con permiso). Yo también soy de ese club. Desde Cortilandia….Litereitor(é)
Nota: pues ahorita mismo voy y quito el espumillón, hala! (díme, Marcos,y qué hago con los Ferrero Rocher……estaban tan ricos….me los regaló un tal Anónimo anónimo…. Mmmmm…. Pues igual me los ceno todos de una vez y así me olvido de ellos,Ea!
Me alegro que te haya gustado, querido litereitor(é), siempre es agradable constatar que no todo el mundo se vuelve gilipollas al llegar estas fechas. Y hablo de los gilipollas, no de los que no lo son.
Litereitor… tienes una sornita que me mola mucho, ya lo sabes, pero te estás jugando una reprimenda, principalmente desde la zona vasco-navarra; ¡cómo te gusta provocar!!
Además, ya deberías saber, por el mes pasado, que los bombones por la noche atraen bomberos, cuidadín, cuidadín y, que a no ser que tengan mucha leche (de la buena) no ayudan a prevenir la descalcificación.
Nos leemos, mon amour.
Nunca dudé de tu intuición.
No es que me guste provocar. Me gusta el humor, simpletemente. pero en esto soy un ser solitario, lo sé, y una criatura incomprendida, como ves.
Me gustan tus «descalcificaciones». Son amables
Del Norte, dices?anda! pues yo también!
Nos leemos? Siempre nos habíamos leído, chery
Chery… me gusta, nos seguimos leyendo, pues…
¡Mucho norteño anda por estos rincones!
Tu escrito tiene la fuerza de lo auténtico. La fuerza de una idea largamente contenida y liberada al fin a fuerza de reflexiones que , a modo de aspersor, nos salpican a todos. Desbocado desde el principio y sin variar el ritmo, desembocas en un último párrafo sembrado de imágenes que circulan sin tregua, una detrás de otra, a modo de metralla.
Recurso éste difícil de mantener todo el tiempo con el mismo nivel de intensidad, tratándose de aciertos como los que encontramos en este escrito . Me ha gustado, jaté!
Gracias Nieves por tu estimulante comentario. Con él parezco menos perro verde.
Sin duda es época de extraños para extraños, y solo colgaría algunas bolas en las farolas de mi ciudad. Buen testo. Saludo y feliz navidad (risas)
Perdón, Texto.
Agradecido Ramón. Agradezco el saludo y tus deseos de felicidad. Por supuesto, también deseo lo mejor para todo el mundo, faltaría más.
Estamos entre esa gente a la que la palabra Navidades les hace escupir un “Horror, ya están aquí” o “Que pasen ya”. Tú lo sabes plasmar (con tu buen hacer y la mala leche que te caracteriza, pirómano de pacotilla) con un tobogán de sensaciones, historias e imágenes que acaban dándonos ganas de huir sin saber a dónde, sabiendo que otra vez, otro año, volverán como una amenaza.
Gracias y que pasen pronto.
Gracias un-tal-Miguel. Como muchas veces suelo decir, me han dibujado así. ¡Ójala nos encontremos algún día!
Leo tu relato y lo entiendo hasta esa «constitución democrática de viviendas» que me echa del texto pues no entiendo la metáfora o ironía. Lástima, problema mío, seguro.
Salud Ximens! «viviendas para todos los que puedan», por supuesto. Posiblemente, con lo consumido en gilipolladas callejeras durante este festivo mes de Diciembre, aumentaría el número de los que podrían. Gracias por tu comentario.
Marcos, que ésto es un teatro en el que o estás de actor o estas de pagador de la entrada, que es lo que fastidia. Fuera hace frio. Si te gusta la histrionía serás feliz actuando. El libreto se escribió hace muchos años. Lo que no soporto es a los de la claque.
Nos vemos frente a las alubias el día de los Santos Inocentes.
Un abrazo.
Duro relato (más que relato crónica), que nos transporta de golpe a la realidad. Siendo cierto todo lo que dice, no es menos cierto que quizás tampoco sea malo que la vida (esa puñetera vida que nos ha tocado vivir a la mayoría) nos de una tregua, aunque sea ficticia, y nos permita, con la excusa que sea, al menos poder soñar…
J. Ariza. Desde Córdoba, en contra de los desahucios.
Gracias Javier por tu comentario. Es verdad que la vida, cuando comenzaba la Navidad en nosotros, era más como la describes en la primera parte de tu gracioso y positivo relato, lo que pasa es, que en mi caso yo era menos consciente y soportaba sin lucidez que un año me trajera aquel viejo unos vaqueros y, al año siguiente los indios, y al siguiente los caballos de todos ellos. Fue mucho después cuando ya comencé a soñar con la patada en el culo de todas esas figuras legendarias y despiadadas que traen engaños para medio mundo. Mi sueño actual es crear un partido político para dar patadas en el culo a todo aquel hijo de puta que anda por el país (de momento, ya haremos sucursales) jodiendo los sueños y realidades de la inmensa mayoría. ¡No a los desahucios, of course!Soñemos con el 2013. Salud. M. Santander.
Buen texto, certero, sí, pero del tema central de la mula y el buey, no has dicho nada… Por cierto, yo últimamente he cambiado de opinión, ya no espero que se acabe la navidad, ahora la miro como quien mira un esperpento, asombrado y divertido.