45. PREHISTORIA
Sintiéndose vacío, el hombre de las cavernas decidió que, para combatir la barbarie no hacía falta más barbarie sino todo lo contrario, de modo que se afanó en barrer el rencor, en pulir la desconfianza, en abrillantar la convivencia…, pero al ver que ni aun así era posible la civilización, entonces se dibujó a sí mismo y a los demás unidos en tareas comunes, y así nació el arte.
Juan Manuel, Porqué no? lo mejor de todo que lo hizo con ese afán de convivencia. Suerte y saludos
Solamente el arte nos salva de todos los males…, creo
Y lo leo hoy tras lo de ayer en Barcelona, un día en el que estamos huecos. No hemos aprendido nada y, a la vez, siempre hay alguien que nos puede llegar a salvar.
Gracias y enhorabuena
Pues de eso habla el relato y nada más: de la barbarie que pretende imponerse frente al diálogo. Hablar es un arte, y todo el mundo no tiene ese don.
Un abrazo
Una imagen que se repite en nuestros días.
¿Estaremos abocados a no entendernos nunca?
Ojalá a través del arte puedan entenderse los pueblos, sin temores ni reservas.
Buena noche de luna creciente.
El arte es lo único que quedará, y nada más. Seremos lo que el arte diga de nosotros.
Un saludo
JM
Gracias a tu micro, JUAN MANUEL, en cierto modo, me has hecho conocer las Cuevas de Altamira.
Me encantó. Cariños,
Mariángeles
Vaya, qué responsabilidad. Aunque en el fondo lo que vemos en la pintura rupestre es una imagen fija de nuestro pasado, lo que quería «mi» cavernícola.
Un saludo
JM
Seguro que esa capacidad y conexión con la creación es lo que distingue al hombre de la bestia. Tus prehistóricos dieron un gran paso.
Eso sí que fue una gran muestra de arte, ellos los Artistas.
Saludos,
En la barbarie no solamente no hay arte sino que se destruye el anterior.
Un saludo
JM
El arte es saber plasmar la emoción de forma que se pueda disfrutar en cualquier lugar y por cualquier persona que quiera dejarse llevar.
Un abrazo
Y no solamente emociones, también hay proyecto social y voluntad de civilización. Otra cosa es que se consiga.
Un saludo
JM
Un buen relato que hace reflexionar.
Apacible otoño.