Esta Noche Te Cuento. Concurso de relatos cortos

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OCT74. ANHELO, de Virginia González Dorta

Por si alcanzaba alguna, para saber de su tacto y de su aroma, subió a la colina más alta.  Al llegar a la cima, seguían lejanas, inaccesibles.
Trepó  a una montaña mayor, luego a otra y a otra.
Incansable, se ganó todos los ochomiles, sin poder atisbar siquiera de dónde salía el titilar que lo cautivaba.
Desde el balcón contempla ahora el triángulo del verano.
Y en el cuerpo, tatuadas para siempre, fulgurantes, con su polvillo en la sangre, siente un rumor: el de los tres astros girando alrededor del corazón.

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40 Responses

  1. El ser humano tiende a buscar respuestas intentando ir más allá, sin embargo siempre existe una raya que no alcanzamos a cruzar… ahí comienza el viaje imaginario.

    Te dejo un beso, Virgi.

  2. El titilar de tus estrellas,cautiva. Deja poso ese polvillo que entra por sangre y va directamente al corazón, es como cuando miramos la bóveda oscura, te atrae por su grandeza luminosa.

    Magnifico amiga, besicos

    1. Pues sí, Isabel, el cielo es algo extraordinario, un placer contemplarlo e intentar saber algo de lo que nos muestra.
      Sabes que te agradezco mucho que vengas, un abrazo luminoso. Como tú.

  3. Estaría genial algo así, Edgar. Pero no lo veremos, de momento me quedo con el triángulo del verano, el cinturón de Orión o los cúmulos de Sagitario (¡toma ya!)
    También gracias. Muchas y besos

  4. ¿Quién dice que no los veremos?. Virgi, ¡claro que que los he visto! Elevándose hacia las alturas en pleno circo de Las Cañadas del Teide, entre el silencio de volcanes, rocas y pumitas. Despareciendo velozmente entre las estrellas que siempre admiras y que permanecen en los corazones.Me gustó de nuevo tu creación. Una estrella para tí, sensible y potente como la que añora Edgar.

  5. Para mí este cuento es un poema. Y podría leerlo así:

    Por si alcanzaba alguna,
    para saber de su tacto y de su aroma,
    subió a la colina más alta.
    Al llegar a la cima,
    seguían lejanas, inaccesibles.

    Perdona la libertad pero es como yo lo siento. A mi me parece una historia singular, una utopia personal.

    Felicidades. Un abrazo. Franziska

  6. A mi tu relato me lleva a esa lucha por el conocimiento y llegar al origen. Y el giro sin embargo lo llevo a tres amores (quizás hijos) que tiene ahora que ya no puede subir montañas.

  7. Lo del conocimiento lo llevo bien grabado, afanosa siempre por aprender. Pasé años contemplando el cielo, constelaciones, tamaños, intensidad, colores…un mundo fascinante.
    El maravilloso triángulo del verano (Vega, Deneb, Altair) es uno de los placeres del cielo.
    Gracias, Ximens.
    Muchísimas

  8. Inalcanzables y no por ello no deseadas. Una estrella más que brilla con fuerza y ternura….No dejar de sentir nunca ese rumor alrededor del corazón…
    Siempre brillarás en ese marco donde el infinito se deja contemplar.
    Precioso!!!

    Un gran abrazo

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