11. LA CONCIENCIA (Paloma Casado)
Creíste que no habían quedado huellas. Afuera, la calle se extendía intransitada, desierta. Las joyas y el dinero de la usurera cupieron en una simple bolsa que no hubiera levantado sospechas si te hubieras encontrado con el sereno del barrio, pero tampoco. El que la anciana tuviera el sueño tan liviano resultó ser un daño colateral que no había formado parte de tus planes. Fue todo tan rápido, tan instintivo coger ese atizador al alcance de la mano, tan frágil el viejo cráneo que se partió con un leve crujido… ni siquiera le dio tiempo a reaccionar al encontrarte. Solo un gritito apagado por los cortinajes. Pero ahora, al doblar la esquina la has encontrado cambiando de dirección su cabeza para mirarte. Intuyes que te va a seguir el resto de tus días hasta hacer que cometas algún error, por ejemplo, que vuelvas al escenario del crimen o que intentes vender las alhajas con precipitación. Solo ahora, sabes que sí, que quedaron huellas en tu mano y en esa oscuridad que cubre tu corazón como una pesada capa. Y te preguntas si la conciencia es una sombra de Dios o del Diablo.
Paloma, has conseguido una historia bien urdida y con fuerza. Suerte y saludos
Ufff Paloma, ¡Vaya relatazo y vaya si deja huella!! Felicidades y suerte.
Besicos muchos.
La conciencia parece algo externo (siempre nos acordamos de Pepito Grillo) pero como casi todo, lo bueno y lo malo, lo divino y lo diablesco, lo tenemos dentro, y no hay peor enemigo que uno mismo. Las acciones traen consecuencias en cascada, a veces inesperadas: tras un robo, puede venir un crimen.
Esa sombra que persigue a tu personaje es como la suya propia, que también le seguirá toda la vida. Se siente el tormento del personaje, con una frase final para recordar y citar
Un abrazo, Paloma. Suerte
Sin duda del diablo Paloma. Me ha gustado mucho. Un abrazo.
Muy bueno, Pa. Duro y certero.
Historia de una tragedia, sin dramatismo en la narración y con una antológica frase final.
8
Buen relato Paloma, y da qué pensar. Esa pregunta que se hace tu protagonista no es fácil de contestar.
Mucha suerte.
Un buen repaso a la conciencia de un asesino.
Buena apuesta, Paloma.
¡Suerte! y beso.
Paloma, a tu protagonista le persigue su conciencia tras cometer un asesinato. De ella nunca se puede escapar. Tremendo relato.
Te deseo mucha suerte.
Besos.
Una sombra que se extiende sobre su vida y que ennegrecerá su existencia. Gran relato, Paloma. Abrazos y suerte.
Y conque facilidad me llevas hasta dónde quieres, tocaya!
Felicidades.
Un abrazo.
Me resulta muy visual este relato, lo «veo» perfectamente en una sucesión de escenas. Y la frase final es para enmarcar. Un abrazo y suerte.
Como me gusta esa frase final, Paloma. Bueno, y el resto 😉
Suerte y abrazos.