SEP85. TODO DICHO, de Ana Isabel García
Fue un perfecto atardecer de septiembre, el cielo estaba surcado por la más increíble policromía de tonos rojizos que jamás habían visto y una suave brisa jugaba con sus cabellos.
Allí estaban, sentados frente al mar, fundidos en un cálido abrazo, callados, sin hablar, simplemente sintiendo los latidos de sus corazones.
El sol caía hacia el mar lentamente, buscando su descanso diario, igual que la fruta madura busca su descanso en la tierra, cuando llega a su plenitud.
El ocaso era inminente, el suave abrazo se convirtió en un abrazo eterno, cada vez más apretado, mientras, por sus mejillas rodaban lagrimas silenciosas. Se miraron a los ojos, tan profundamente que sus almas hablaron de nuevo.
Ella se levantó, sus cuerpos se separaron lentamente, solo sus manos quedaron en contacto y deslizando sus palmas recorrió sus largos dedos hasta las yemas, los dos miraban fijamente esos dedos, que se separaban y que ponían distancia entre ellos, fiel reflejo de todo lo que estaba ocurriendo.
No hubo palabras, ya estaba todo dicho y a la vez que el hermoso día se terminaba, se terminaba su hermosa historia de amor.
Ella echó a andar y sin mirar atrás, siguió su camino.
Me gusta ese tono de aceptación, de triste consentimiento, de calma con que la pareja de amantes disfrutan de su última tarde y se despiden. Dibuja una atmósfera idílica, de ensoñación.
Un abrazo, Ana Isabel. Mucha suerte.
Amparo Martínez Alonso
Si alguna vez las despedidas fueran como esta, yo no me podría separar nunca. Escribes tan bien sobre sentimientos que provocas un sentimiento muy profundo de tristeza. Cuando sea mayor quiero escribir como tú, que con pocas palabras hacer llorar a la gente.
Suerte, Anai, mi Anai!!!
Verdaderamente, ninguna despedida es alegre, nos dejamos muchas veces el alma en ellas.En este caso, creo, que nuestra amiga en su micro, nos dejó también su corazón. Felicidades, Anai, y mucha, mucha suerte!!
me encantan las historias de amor,y que tristes las despedidas..pero sufrir también es parte del amor..te felicito Ana ,suerte! 🙂
me ha recordado a mi historia personal,gran relato ani
Ay, el adiós siempre tan triste y sin sentido. Muy bonito, que tengas suerte Ana Isabel
Ana Isabel, muy romántico, no merece terminar así ese amor, vuelve a juntarlos, porfa.
Un beso
Todo dicho y sin cruzar una palabra. Triste y sereno a la vez, me gusta eso del descanso diario del sol. Da pena, sí, yo pido como Epifisis que los vuelvas a juntar cuando brillen las 3 estrellas de octubre.