SEP44. PUERTO SIN FIN, de Luis Cruz Cubero Villalba
Recuerdo las intensas palabras de mi director de carrera la noche anterior: «a pie de puerto, Jesús y Dani se pondrán a tirar del grupo, los rivales irán cayendo como fruta madura… tú ánimo, que la Vuelta es nuestra”. Puede que en nuestros planes fueran cayendo, pero ya llevamos cinco de los diez kilómetros, y todavía veo la rueda de mis perseguidores en la general. En ese momento, yo pienso que ya no puedo, tengo dudas de mi vida y de mis proyectos. Me pregunto ahora por qué estoy aquí, por qué dar pedales es mi oficio, por qué tenemos que estar aquí… ¡Vaya! Otra pendiente de vértigo en mis ojos, los oídos me zumban, no entiendo nada. Pero después, miro la carretera y lo entiendo todo: veo la rueda de mi compañero de Jesús, pienso en su ayuda durante tantas carreras y comprendo una oportunidad. Jesús me hace una señal y yo entonces cambio el desarrollo y sé que es mi momento. Cuando quedan cuatro kilómetros para la meta, la multitud me jalea, y yo no sé si ganaré por fin la carrera, pero daré todo por esos compañeros, por esta nuestra pasión que es el ciclismo.
Excelente relato, no sólo sobre el ciclismo, sino sobre la superación y el compañerismo. Como en todo en la vida, sin buenos compañeros no se puede llegar a ningún «puerto» (aunque sea de montaña en este caso). Usas magníficamente las palabras, describes perfectamente y nos introduces de lleno en la acción. Mucha suerte con tu relato, Luis Cruz.
Muchas gracias, Jesús. Es un honor recibir tan buena crítica de un buen escritor como tú.
El compañerismo es lo que hace, la mayoría de las veces, saborar la victoria.Buen relato.
Es un relato de mucha actualidad y si me permites te propongo que si lo «adaptas» un poco lo puedes presentar al concurso «Creciendo juntos». Las bases están a la derecha de este blog.
Suerte y un abrazo.
Hola vecino de abajo, por fin sigo con mi lectura de relatos y me encuentro con un ciclista, que bueno!!!, mi chico está ahora mismo roncando en el sofá, esta mañana de domingo se ha metido 3 horas de bici incluida la subida a Urkiola, … ójala fuese acompañado como tu protagonista.
Es una propuesta tan diferente al resto de relatos y tan bien escrita…gracias!!
Hola, muchas gracias a ti, me alegro que te guste. La verdad es que las gestas ciclistas se prestan mucho a lo literario y por eso lo pensé. Por otro lado, me inspiró el hecho de que en la jerga ciclista existe esa expresión de la «fruta madura». Curiosamente, justo después de escribir este relato, se produjo ese «ataque heroico» de Contador.
Luis, yo que voy trepando por los relatos hacia arriba, te encuentro y reflejas muy bien el esfuerzo y la lucha. Suerte.
Un abrazo