SEP43. ÁRBOL DE VENENO, de Mª Carmen Gómez Caro
Salgo de casa dando un portazo. Las lágrimas se asoman a mis ojos y no sé a dónde ir. Hace frío y no he cogido el abrigo. Camino sin rumbo, quizás hacia allá…quizás. Te necesito, pero me vuelves la espalda. No quiero pensar ahora, sólo quiero que la tierra me acoja y me consuele. Mis pasos son erráticos en esta ciudad dormida o muerta. Una herida vieja se vuelve a abrir en mi pecho, y vuelven a salir ramas de viejas penas y racimos de llantos, como cosechas inesperadas. En este árbol de veneno madura una extraña fruta amarga.
He llegado andando al cementerio y sin ningún sentido, me abrazo a la verja y me siento en el suelo. Todo en mí es lágrimas y furia, y un desear a la vez morir y que llegue el mañana.
Al amanecer, cuando me trago la fruta amarga, vuelvo a casa despacio, sin llorar, entro en nuestro dormitorio y me acuesto a tu lado. Tú duermes fingiendo que nada ha pasado, pero el escape de tu moto está caliente y hay manchas de barro en la entrada. Que me estuviste buscando, lo sé. Que me has perdido esta noche, lo sabes.
Me gusta ese enigmático final. Enhorabuena y suerte.
Triste historia de ruptura con un final magnífico!!
El comienzo de la historia denota el enfado de la autora y el final definitivamente lo confirma. Suerte y un abrazo desde Honduras.
Buen ritmo,buena historia, buen final.
Suerte.
Muy bien descrita la tristeza, la rabia y la angustia del momento, yo también me he sentido alguna vez así. Suerte
Precioso in crescendo y esperado final intrigante que cuando se lee una vez no se puede evitar volver a leerlo. Muy bien descrito ese sentimiento de rabia, impotencia, tristeza y fracaso.
Suerte, Mª Carmen!!!
Muchísimas gracias a todos. De verdad, estoy tan agradecida que no sé que más decir. Para mí significa mucho que os haya gustado este relato, porque he puesto en él poca técnica para que cupiese mucha alma. Gracias por apreciarlo. Besos a todos.
Carmen, me deja tu relato una sensación de incertidumbre y tristeza muy grande, será acaso porque está muy bien hecho. Suerte.
Me gusta!!! ¿qué has puesto poca técnica? madre mía, el final es glorioso. Describes bien el sentimiento de decepción y ruptura, sin entrar en mayores sentimentalismos. el título está muy requetebien,
MªCarmen, estoy con los compis,está muy bien, no te infravalores.
Un beso
Gracias por vuestros comentarios, compis. María y Tere, es un honor que os guste; intentaré mejorar relato a relato, si puedo. No es que me infravalore, Epi, es que a veces escribo a golpe y porrazo, sin corregir siquiera para no romper la inspiración, y así el relato, aunque queda más real, suele tener ritmo irregular, repeticiones…Como yo me invento nombres para todo, a esto llamo «poca técnica para que quepa mucha alma». Sí, ya sé que es cursi, pero es que me cogió el cuerpo así.¡Qué se le va a hacer!. Gracias por tus comentarios, Epi.
Por cierto, te he llamado al 69696996969 y comunica todo el tiempo, y una señorita muy amable me dice que la línea está saturada.
Besos a todos.
El árbol del dolor, que está vizualizando la mujer, y sus frutas amargas funcionan muy bien para exteriorizar los sentimientos confusos y agobiantes y la ayudan a tomar una decisión. Me ha gustado mucho, Mª Carmen.
Un abrazo.