70. Fotogramas sueltos
Fotogramas sueltos. La vida son fotogramas sueltos que lanzamos al aire vestidos de olas de metal. Pulgares arriba y smilies. Soy una yonki de los pulgares arriba. Nuestras fotos en la playa fueron diez. La boda nos trajo cien. La luna de miel en Bali, cincuenta. Los pies minúsculos y arrugados de nuestro recién nacido conformaron una explosión de quinientas dosis. También nos dieron cien corazones, aunque a mí sólo me gustan esas manos cerradas con la manga azul y con el dedo en alto.
Nuestro primer beso en público, en cambio, nada más que atrajo un índice acusador, una carrera por el centro comercial, una mujer conduciendo un coche y una farsa de adulterio. Tres pulgares abajo. Sigo colgada de esas malditas falanges, con la cabeza en una nube y los pies buscando firme.
Fotogramas sueltos. La vida son fotogramas sueltos que enviamos al cielo como palomas de microondas. Ojalá tuviera una cámara ahora. Sería mi primera foto desnuda, insinuante, con esta preciosa tobillera de Dior, la soga al cuello y tres gotitas de Chanel. Fotogramas sueltos. La vida son fotogramas sueltos.
Fran, se desliza la historia con tono calmado y evocador hasta ese final tan bueno. Suerte y saludos
Gracias Calamanda. Un honor para mí ese comentario.