JUN42. MANUELA, de JoséMa P. Carpintero
No queda rastro de su timidez ni del aire asustadizo que la acompañaba. Ahora camina con paso firme y la cabeza alta, saluda y sonríe con seguridad.
Desde que de su DNI desapareció la “a” final es otra -perdón, otro-, y la verdad a mí me gusta más ahora. Le siento más real, más feliz y más libre.
ese narrador que termina siendo otro personaje está conseguido
¿Vaya cambio! Menos mal que es para convertirse en alguien mejor.
Gracioso y muy certero en la extensión y lo contado. Hay que quitar hierro a estas transformaciones como lo haces en tu micro. Suerte.