JUN10. YA NADA ES IGUAL, de Héctor Ramón Romero
Nada es igual, tu mirada ya no tiene la mansedumbre del agua, que baja cantarina de la montaña,tampoco tu voz, tiene la suavidad del terciopelo, ni el calor de un abrazo sin motivos, ni razón; tu piel, perdió la brújula para encontrarse con mi piel, y,…naúfraga navega a la deriva, sin norte ni sur hacia lo desconocido; cambiaste, como cambia el viento en el desierto, sin previo aviso y en un segundo se desató en ti, una furia descontrolada y un vendaval de palabras se atropellaban por salir de tu boca, esa misma boca, que en tantas noches de placer me besaban con pasión infinita.
Hoy es día de visita y,…te visito, estás en una habitación acolchonada y,… ya nada es igual.
Duro y bonito el relato.
Los que hemos leído libros de antipsiquiatría consideramos que «algunos» enfermos mentales no recibieron la terapia adecuada. Hay personas, también, que llegan a «enfermar» porque son el catalizador de unas relaciones tóxicas que se dan a su alrededor y la persona más fragil, más buena, a veces… la más inteligente es la que absorve todas las malas vibraciones del entorno familiar, o laboral o del grupo de amigos, y se quiebran justo ellas. Y como el resto no va aceptar nunca su parte de culpa…
También ya sabemos que en el cerebro hay múltiples conexiones, descargas, enzimas, zonas que interactúan unas con otras, falta de ciertas sustancias… y se puede enfermar y para ello hará falta otro tipo de tratamiento por ejemplo el farmacológico…
Pero… ¿los otros? ¿Y todos en conjunto reciben de la sociedad el trato justo?
Muy poético, incluso por ritmo y forma parece versificado. Buen uso de la frase capicua (empieza y acaba con la misma) Suerte.
me gusto mucho la musicalidad del texto y las comparaciones con la naturaleza… pero…
pero para mi sobran las dos ultimas lineas…
una persona muy «cuerda» puede cambiar con los años por los maltratos de la vida… o de la persona que antaño tanto amaba…
hay personas que muy difícilmente se «salen de madre» pero el día menos pensado lo echan todo por la borda sin tener en absoluto la cabeza perdida… solamente existe lo «basta ya»…
Sí, Kistila. También hay cambios debido a lo que tú dices. Lo peor de todo es cuando no se puede dialogar.
Hay personas que son buenas, incluso muy buenas pero tienen un temperamento «colérico» y cuando les llega el siroco… mejor no estar cerca.
De todas formas, yo planteaba otro tipo de enfermedades llamadas «mentales».
Un saludo para ti.
No se quién eres anónimo del 4 de Junio ,pero me parece que te estás adueñando de algo que no es tuyo,saludos-
Sí, tienes razón. Sin quererlo. Me pongo a opinar cuando un tema ha «sangrado» en mi vida y es verdad que me explayo demasiado. Pido disculpas al autor del relato. Procuraré corregirme. Gracias por el toque de atención, ya lo había pensado, lo que pasa que una vez que ya lo has enviado ya no lo puedes anular, o por lo menos yo no lo sé. Un saludo.
Gracias los puntos que se aclaran se ven con más nitidez