MAY73. NO TE PONDRÉ FLORES, de Magdalena Carrillo Puig
-No sé por qué me miras así, -decía María cogiendo el retrato de su difunto marido en la mano y dándole la vuelta-. Parece como si todo el día me observaras.
Fernando quedó de espaldas al salón.
-No, no te pondré flores, descuida, aunque no me guste. ¿Y qué si lo hice? Sabías que no te quedaba mucho tiempo y no pude permitir que sufrieras más. Sí, ya sé que no te dije nada, ni tú tampoco me lo pediste. No hacían falta las palabras.
Unas lágrimas resbalaron por su rostro mientras giraba la fotografía de nuevo y la apretaba junto a su pecho.
¡Bravo, Magdalena. Buen micro!
Precioso.