ABR.94. AMOR DE UNA NOCHE, de David Moreno
Siempre me has contado que ese hombre llegó una noche con la lluvia, que buscaba refugio, que iba empapado. Que te dio pena, que le dejaste pasar. Que maldita soledad la tuya. Que qué bien le quedaba el pelo mojado y cómo brillaban sus ojos al calor de la hoguera. Que parecía una buena persona y que una cosa llevo a la otra con el crepitar de la leña como único testigo.
Que muy a tu pesar, a la mañana siguiente, el aguacero había desaparecido. Y misteriosamente con él, ese hombre que ya era mi papá, también.
Y de nuevo, la sequía y la soledad de siempre hasta que nací yo nueve meses después. Que te pusiste muy contenta, que no cambiarías nada, que darías la vida por mí. Que las ausencias ya no fueron tales conmigo cerca.
Pero me entra la duda cuando veo abalanzarte hacia la ventana, con el corazón encogido, en cuanto suenan los primeros truenos de una tormenta que no rompe, esperando la venida de un imposible. Y aunque repites una y otra vez que sabes que ya nunca regresará, la ilusión se dibuja, por un segundo, en tu rostro.
Maldita soledad.
Este tormenta está trayendo hermosos aguaceros, como el tuyo, David. Está claro que la esperanza, y con ella la ilusión, no se pierde aunque razonemos que no tiene sentido.
Me gusta mucho, David.
Buenas imágenes y buenos sonidos, el crepitar de la leña, la tormenta que no rompe, la ilusión dibujada en su rostro. Nos vas llevando poco a poco, casi mojándonos con la lluvia, hasta un lugar de esperanza, a pesar de todo. Suerte y saludos
Preciosa historia de abril. Me gusto mucho el ritmo del relato, esa repetición de «que», «que», «que»… Un abrazo.
Un rostro/detrás de los cristales/un te espero/un te quiero.
Muy bueno. Casi poético. Arriesgado. Bien resuelto. Suerte. Saludos
Me encanta la historia, porque refleja la soledad que puede dejar un sólo instante de nuestras vidas, y a la vez : la ilusión y la esperanza que nunca perdemos.
Bonita la imágen que has dibujado,
me gusta mucho. Un besote.