705. NO TENGAS MIEDO, de Alimaña
No tengas miedo, sigue leyendo. Ignora el silencio de la habitación, concéntrate en los sonidos de la noche: el zumbido del viento, los aullidos de alguna alimaña, el crujir de las hojas, los pasos que se dirigen hacia ti… Sigue leyendo, no tengas miedo. Ignora el sonido del bosque, concéntrate en la habitación: el repiqueteo de la ventana entreabierta, el crepitar de las paredes, el pausado movimiento de las agujas del reloj, las pisadas que avanzan hasta donde tú estás… No tengas miedo, sigue leyendo. Ignora la noche y la habitación, concéntrate en ti: el nudo en la garganta, el latir del corazón, la sangre recorriendo tus venas, la gota de sudor por la espalda, la mano que te arropa, la respiración que golpea tu oído… Sigue leyendo, no tengas miedo. Acurrúcate entre las sábanas y libera tu imaginación: los misterios del bosque, la persona que hay junto a ti, el peligro que se esconde en el armario o aguarda bajo la cama. Deja que el miedo se apodere de la noche, sigue leyendo…